En plena ola de revisionismo histórico en América, la memoria colonial de España en Latinoamérica ha vuelto a provocar fricciones en el conocido como “Día de la Hispanidad”.
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Año tras año, el 12 de octubre pone en evidencia que la historia del colonialismo español en América es cualquier cosa menos un lugar de entendimiento entre posturas.
Este año la fecha ha estado marcada por la retirada el pasado sábado (10.10.2020) de la estatua de Cristóbal Colón en la principal avenida de Ciudad de México. Algunos sectores de las protestas convocadas en la capital mexicana para este lunes habían llamado a derribar.
La alcaldesa de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, planteó la posibilidad de que tras su restauración la estatua no volviese al mismo sitio: "A lo mejor valdría (…) una reflexión colectiva de qué representa (Colón), sobre todo hacia el próximo año”.
Mientras tanto, las celebraciones en España del conocido como "Día de la Hispanidad”, que conmemora la llegada de navegante genovés al continente americano en 1492, han estado marcadas por la austeridad y el distanciamiento social como consecuencia de la grave situación sanitaria del país ibérico y en concreto de su capital. Madrid es la región más duramente golpeada por la segunda ola de coronavirus en Europa.
El debate ha vuelto a desatarse en redes sociales entre quienes piden una postura más autocrítica por parte de la antigua metrópoli y quienes apelan al orgullo nacional para rechazar estas críticas. El partido ultraderechista incluso ha revindicado el "descubrimiento” de América y sus seguidores se han manifestado en varias ciudades españolas.
La postura de Madrid respecto a gestión de la memoria colonial ha vuelto a cobrar relevancia estos días luego de que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, reiteró el sábado que la Iglesia y la monarquía española deben "ofrecer una disculpa pública a los pueblos originarios que padecieron de las más oprobiosas atrocidades”.
Con horas de diferencia, las redes sociales también han amanecido en América Latina volcadas en la jornada de conmemoración histórica. En muchos países el 12 de octubre es conocido como Día de la Raza, pero en los últimos años varios países han sustituido esta denominación por otras como el Día del Respeto por la Diversidad Cultural en Argentina.
Mientras tanto, en Estados Unidos, donde el movimiento Black Lives Matter ha alimentado una ola de revisionismo histórico y en los últimos meses se han retirado varias estatuas que homenajeabas a figuras esclavistas o del colonialismo español, varias personalidades de ascendencia italiana se han movilizado para defender la memoria de Colón. Allí el 12 de octubre tradicionalmente se ha celebrado como Día de Colón. Entre las figuras movilizadas se encuentran el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo; el virólogo de la Casa Blanca, Anthony Fauci, y el cantante Andrea Bocelli.
eal (efe, elmundo.es, elpais.com, Twitter)
Monumentos polémicos en América Latina
El debate sobre historia, memoria y emplazamiento o remoción de estatuas, reavivado por protestas mundiales contra el racismo y el colonialismo, tras el asesinato de George Floyd, no es nuevo en América Latina.
Imagen: picture-alliance/dpa/F. Lavoz
Cuba: "¡Y no me digan que eso es patrimonio!"
En Cuba, el actual debate antirracista recuerda el abierto en 2011 por "El Disco Negro de Obsesión": el dúo de rap pide remover la estatua de José Miguel Gómez, mayor general independentista y segundo presidente de la República, que masacró el alzamiento de los "Independientes de Color" (1912). Su propuesta: sustituirlo por el paradigma de luchadora independentista cubana, Mariana Grajales.
Imagen: picture-alliance/Design Pics/M. Thornton
Colombia: "Quítenle el nombre a esa universidad"
En Colombia, según el catálogo del Banco de la República, Sergio Arboleda y Pombo fue "un hacendado, esclavista, periodista, militar y político (…). Ideólogo del Partido Conservador." Su condición de "esclavista" impulsa hoy pedidos en redes sociales para renombrar la Universidad Sergio Arboleda, en Bogotá, de la que se graduó el actual presidente de Colombia, Iván Duque (2do, izq.).
Imagen: picture-alliance/ZUMAPRESS/H. F. Zamora
Chile: contra colonizadores y militares
En Santiago de Chile, la Plaza Baquedano, conocida como Plaza Italia, se adelantó un año al actual revuelo. Allí, en el epicentro del estallido social de 2019, la estatua de Manuel Baquedano, general chileno que representa la victoria en la Guerra del Pacífico, fue rayada, pintada y vestida como parte de protestas antisistémicas que arremetieron contra colonizadores europeos y militares chilenos.
Imagen: picture-alliance/dpa/F. Lavoz
Ofrenda a Caupolicán
En varias ciudades chilenas, fueron removidos bustos del conquistador Pedro de Valdivia, fundador de Santiago. En Temuco, al sur de la capital, con gran parte habitantes de origen mapuche, no solo le tocó a Valdivia, sino también al piloto de la fuerza aérea chilena Dagoberto Godoy: su cabeza terminó colgada de una mano del guerrero Caupolicán, ícono de la resistencia ante el imperio español.
Imagen: imago images/Agencia EFE/C. Tapia
Perú: cada vez más lejos del centro de Lima
En Lima, la escultura del conquistador Francisco Pizarro, objeto de controversias con detractores varios desde su primer emplazamiento en 1935, ha ido cabalgando "hacia el olvido", según la prensa local: del atrio de la Catedral al costado del Palacio de Gobierno, a una plazoleta de la Plaza de Armas y, finalmente, al Parque de la Muralla, en la ribera del río Rímac.
Imagen: picture-alliance/El Comercio
Argentina: Cristóbal Colón, "el monumento de la discordia"
El monumento porteño a Cristóbal Colón, hoy en el Paseo de la Costanera, en Buenos Aires, estuvo antes frente a la Casa Rosada (foto), sede del Gobierno argentino. En 2013, la entonces presidenta Cristina Kirchner decidió sustituirlo por uno a Juana Azurduy. Pero el Gobierno de su opositor y sucesor, Mauricio Macri, garantizó a Colón su nueva vista privilegiada junto al río La Plata.
Imagen: picture-alliance/ZB/J. Woitas
¿Héroe nacional o genocida?
Uno de sus primeros presidentes de Argentina, Julio Argentino Roca (1880-1886 y 1898-1904), es considerado por muchos un héroe nacional. Hay estatuas suyas, calles con su nombre, y el billete de 100 pesos llevó su cara hasta 2015. Sus detractores le niegan cualquier homenaje. Lo acusan de genocidio contra miles de indígenas mapuches y tehuelches durante la llamada Campaña del Desierto.
Imagen: picture-alliance/dpa/H. Hollemann
Ecuador: "símbolo de la corrupción" en Argentina
Esta estatua del expresidente argentino Néstor Kirchner presidió la entrada a la sede de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) en Pichincha, al norte de Quito, Ecuador, hasta que el Parlamento ecuatoriano la hizo retirar en 2019, por considerarla "símbolo de la corrupción". Kirchner fue el primer secretario general de Unasur, y la estatua, un regalo de su esposa y sucesora, Cristina.
Imagen: picture-alliance/AP/D. Ochoa
Bolivia: del "apoyo incondicional" al rechazo
En 2013, el presidente Evo Morales inauguró en Riberalta, Beni, una estatua de su aliado, el difunto presidente venezolano Hugo Chávez: "por su apoyo incondicional a esta región amazónica, a través de la refacción e implementación de avenidas y carreteras". Tras las polémicas elecciones generales de octubre de 2020, un grupo de personas derribó el monumento, en protesta contra el conteo de votos.
Imagen: AFP/J. Bernal
Venezuela: ¿"Tirofijo" o Fidel Castro?
También en 2013, el líder opositor venezolano Leopoldo López participó del derribo de una supuesta estatua del líder fundador de las FARC, alias "Tirofijo", en la localidad fronteriza de El Amparo, por considerarlo "enemigo de la paz" de Colombia y Venezuela. Pero la efigie resultó ser del expresidente cubano Fidel Castro, erigida allí junto a las de Simón Bolívar, "Che" Guevara y Hugo Chávez.
Imagen: picture-alliance/dpa/M. Gutierrez
"Tirofijo"
No obstante, el exjefe de la mayor guerrilla de Colombia, Pedro Antonio Marín, alias "Manuel Marulanda Vélez" o "Tirofijo", sí cuenta con un controvertido monumento en su honor en el barrio 23 de Enero, en Caracas, la capital venezolana. Cuando fue develado, en 2008, el Gobierno del expresidente colombiano Álvaro Uribe lo calificó de "provocación" y grave "afrenta" contra la democracia.