Meloni: Acuerdo migratorio "modelo" entre Italia y Albania
10 de noviembre de 2023
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, alabó acuerdo con Albania para abrir dos centros de identificación y acogida de inmigrantes en su territorio y lo definió como un "modelo" histórico de colaboración europea.
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"Es histórico porque también puede convertirse en un modelo para otras naciones de colaboración, entre países de la Unión Europea (UE) y extracomunitarios en la gestión de flujos migratorios", dijo en un vídeo en el que repasó las últimas medidas de su Gobierno.
En concreto serán dos centros: uno en el puerto de Shengjin, que servirá para el desembarco y la identificación, y un segundo en el interior del país, en Gjader, para los trámites posteriores, como la presentación de la solicitud de asilo o la repatriación.
Serán centros en territorio albanés pero bajo jurisdicción italiana y trabajadores italianos, afirmó Meloni. A su parecer es "un acuerdo histórico y totalmente innovador" que perseguirá tres objetivos: "combatir el tráfico de seres humanos, prevenir los flujos migratorios irregulares y acoger en Europa solo a quien tenga derecho a la protección internacional", sostuvo.
Capacidad para 3 mil inmigrantes durante proceso de 28 días
Los dos centros tendrán capacidad para 3.000 inmigrantes y, según sus cálculos y gracias a los procesos acelerados por su Gobierno, de 28 días, podrán gestionar hasta 36.000 inmigrantes al año.
"Es un acuerdo de gran inspiración europea con el que Albania se confirma no solo como una nación históricamente amiga de Italia sino también amiga de la UE porque a pesar de que aún no forme parte de la UE, Tirana se comporta como si ya lo fuera, asumiendo elecciones absolutamente en línea con los principios de cooperación y solidaridad que basan la unidad europea", celebró.
Las organizaciones humanitarias que rescatan inmigrantes en aguas del Mediterráneo, como Médicos Sin Fronteras, han calificado el pacto de "ataque al derecho de asilo", mientras que el opositor Partido Demócrata pedirá la expulsión del Partido Socialista Europeo del primer ministro albanés por esta medida.
jov (efe, euronews)
Atrapados en la "jungla" de los Balcanes
Cientos de refugiados acampan a cielo abierto entre Serbia y Croacia. Mantienen la esperanza de llegar a Europa occidental y escapar de la vida en la "jungla". Dimitris Tosidis informa desde Sid.
Imagen: Dimitris Tosidis
La vida en la "jungla"
Más de 150 personas se esconden en la "jungla", una frondosa zona junto a una vía ferroviaria que une a la fronteriza ciudad serbia de Sid con Croacia. La mayoría de sus habitantes llevan en la mochila varios intentos de llegar a Europa central: con ayuda de traficantes, solos o en grupo, como polizones en camiones o trenes de carga.
Imagen: Dimitris Tosidis
El rastro de las lágrimas
A primera vista parece fácil seguir los raíles del tren. Pero el camino les ha costado la vida a muchos, cuentan los habitantes del campamento. Dos personas se quedaron dormidas en las vías y fueron arrolladas por el tren.
Imagen: Dimitris Tosidis
Las penurias del día a día
El afgano Ibrahim aprovecha el frío riachuelo que discurre bajo un puente para su higiene personal. Como él, todos los refugiados de la "jungla" viven en condiciones insostenibles: no hay servicios ni instalaciones para lavarse. En realidad, en Sid no hay nada para los migrantes.
Imagen: Dimitris Tosidis
Desayuno sobre ruedas
No todos los habitantes de la ciudad tratan igual a los refugiados. "No Name Kitchen" (cocina sin nombre), así se llama la iniciativa llevada a cabo por voluntarios que reparten el desayuno en el campamento. De parte de las autoridades serbias, en cambio, no llega ayuda de ningún tipo para la "jungla".
Imagen: Dimitris Tosidis
Un bocado caliente, por fin
Una comida caliente como la que cocinan estos dos refugiados en una fábrica abandonada es una rareza en la "jungla". El hambre, la escasez y la violencia diaria caracterizan la vida de los habitantes de este campamento en un remoto rincón de Serbia.
Imagen: Dimitris Tosidis
Una excepción entre muchos
También Dragan (en el centro de la imagen), que viene de Macedonia, se esconde en los bosques cercanos a Sid. Como el resto de los refugiados de aquí, también intenta abrirse camino hacia Europa central. Entre los cientos de Siria y Afganistán, Dragan es una especie de curiosidad, junto con otro refugiado chino.
Imagen: Dimitris Tosidis
La larga espera
Algunos solicitantes de asilo afganos matan el tiempo en el tejado de una fábrica abandonada. La espera al siguiente intento de llegar a alguna parte de Europa central es a menudo tormentosa.
Imagen: Dimitris Tosidis
Polizón
Un refugiado, un tren de carga, una posibilidad. En apenas un instante este hombre se esconderá en un vagón con la esperanza de alcanzar Croacia y desde allí poder seguir su camino hacia otro país europeo.
Imagen: Dimitris Tosidis
Siguiente parada: ¿Europa occidental?
Aquellos que pueden permitirse pagarle a un traficante intentan atravesar Croacia en taxi rumbo al oeste de Europa. El precio ronda los 1.200 euros.
Imagen: Dimitris Tosidis
La esperanza es lo único que muere
Jadali tiene 22 años y es afgano. Acaba de volver a Sid. Durante su último "intento de fuga" del campamento fue capturado en Croacia y pasó dos días en prisión. Las autoridades croatas, según cuenta, lo trataron muy mal. Autor: Dimitris Tosidis (EAL/VT)