Señor Jordaan, ¿qué enseñanzas le deja el Mundial de Alemania a los organizadores del evento en Sudáfrica?

Muchas, nosotros tuvimos la oportunidad de seguir muy de cerca el Mundial alemán, empezando con los preparativos y terminando con su implementación nos llevamos muchos datos que para nosotros son de vital importancia en el objetivo de brindarle a la afición al fútbol en cuatro años una experiencia similar y al mismo tiempo diferente ya que este será el primer Mundial en África.

¿Qué le gustaría tener en Sudáfrica de todo lo que observó en Alemania?

El entusiasmo de la gente, eso es para mi lo más destacado del Mundial que terminó, la participación de los aficionados fue simplemente espectacular. En ese aspecto Alemania superó todas las expectativas e hizo del Mundial una fiesta que no tenía antecedentes. Eso lo digo como alguien que ha estado constantemente en los Mundiales desde hace casi tres décadas.

¿Qué fue lo que le pareció tan particular?

Los organizadores del Mundial en Alemania consiguieron movilizar el evento fuera de los limites del estadio. Incluso los aficionados que no tenían una entrada se sintieron parte de cada uno de los juegos. Permítame citar como ejemplo Colonia, allí se dieron cita más de 60 mil aficionados ingleses para acompañar a su equipo en las calles de la ciudad, mezclándose con sus anfitriones, compartiendo el sentimiento mundialista a varios kilómetros de la cancha. ¡Sensacional!

¿Será así también en Sudáfrica?

Ese es nuestro propósito. Nosotros, de acuerdo a los planes de infraestructura que tenemos, ofreceremos 3 millones de entradas a los partidos del Mundial, lo cual es poco si tenemos en cuenta que no sólo Sudáfrica, todo el continente, querrá vivir de cerca el primer Mundial que allí se realiza. En Alemania aprendimos que es posible transmitir esas emociones mundialistas a los aficionados que no están en el estadio, que para todos el Mundial puede ser una fiesta.

El lema del Mundial del 2010 es “África llama”, ¿esperan ustedes muchos visitantes?

Como acabo de mencionar, por ser el primer Mundial en África estamos casi seguros que desde diferentes países del continente se movilizarán hacia Sudáfrica grandes masas de aficionados. El lema alemán “El mundo entre amigos” se vivió en la práctica, los visitantes disfrutaron del juego del fútbol en todas sus facetas, no sólo lo que pasaba en la cancha, también la hospitalidad y la alegría de los anfitriones atendiendo a sus huéspedes. Así debe ser Sudáfrica.

Para el continente africano el Mundial del 2010 es una oportunidad de oro para captar la atención internacional…

Es cierto, y nosotros sabremos aprovecharla, así como Alemania logró consolidar, sellar una identidad nacional en torno al fútbol con el Mundial del 2006. Para mí personalmente fue increíble palpar ese sentimiento en Leipzig donde todos celebraban como hermanos sin siquiera pensar en el muro que una vez los dividió entre oriente y occidente. Exactamente eso queremos lograr en Sudáfrica, nosotros estuvimos largo tiempo separados entre blancos y negros y llegó el momento de pensar, vivir y sentir como una nación unida, mirando hacia al futuro, olvidando el pasado. Por eso el Mundial del 2010 es para nosotros, para todo el continente, de vital importancia.

Hay muchas dudas y cuestionamientos respecto a sí Sudáfrica estará lista a tiempo para albergar el Mundial

Nosotros en el Comité Organizador no tenemos ninguna duda de que lo lograremos. Claro que el Mundial será nuestro mayor reto en materia de organización de eventos de este tipo, pero ya en el pasado hemos realizado otros con éxito.

¿Lo lograrán en sólo 4 años?

En cuatro años inauguraremos el Mundial, pero en él trabajamos desde 1998. Eso es mucho tiempo de preparación y por eso confiamos en alcanzar nuestro objetivo.

¿Pero las dificultades están allí?

Y también las soluciones. Nosotros acudiremos a la experiencia de la FIFA, a los que hicieron posible Alemania 2006. Claro que sin tecnología e infraestructura no es posible un Mundial, pero nosotros nos hemos ocupado de que ellas estén a nuestra disposición. Déjeme revelarle algo, en Sudáfrica 2010 el público alrededor del mundo verá los juegos en sus teléfonos móviles y por Internet, lo que en Alemania fue apenas una prueba en Sudáfrica será una realidad, eso ya habla de una tecnología avanzada al servicio del 2010.

¿Cuánta gente vino de Sudáfrica a Alemania para aprender sobre los detalles de la organización de un Mundial?

No tengo el número exacto, pero fueron muchos, y fueron los que tenían que venir. Representantes de las 10 ciudades sedes, miembros de los diferentes grupos de trabajo del Comité Organizador, funcionarios del gobierno, ejecutivos de las empresas vinculadas al Mundial; todos ellos se reunieron con sus similares en Alemania 2006 y gracias a una estrecha cooperación nos llevamos a casa un invaluable conocimiento.

¿Cuál es su balance del Mundial Alemania 2006?

Este fue un Mundial excelente, mis felicitaciones especialmente a Franz Beckenbauer y Horst Schmidt por un increíble trabajo, Alemania le dio la bienvenida al mundo y el mundo se sintió en casa, entre amigos. A Jürgen Klinsmann también hay que hacerle extensivas estas felicitaciones, él con sus jugadores fueron los principales responsables de movilizar a la gente, de sensibilizarla, de crear las condiciones para una fiesta inolvidable en torno al fútbol.

Señor Jordaan, muchas gracias por su tiempo, nos vemos en cuatro años en Sudáfrica.

Gracias a ustedes y hasta dentro de cuatro años.