Afganistán: la gente teme por su vida ante el avance talibán
Saifullah Shams
9 de agosto de 2021
Civiles se ven atrapados en medio de intensos combates entre el Ejército afgano y las fuerzas talibanes. Muchos reprochan a Occidente haberlos dejado a merced de los extremistas islámicos.
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Las fuerzas talibanes tomaron el control de varias capitales provinciales y continúan sus ataques contra el Ejército afgano. La retirada de los efectivos de la OTAN de Afganistán ha dejado al gobierno del presidente Ashraf Ghani en una situación vulnerable, y los insurgentes ganan terreno.
"La situación es insostenible para los habitantes de Kunduz”, dijo a DW Mehrabuddin Hakimi, habitante de la provincia del mismo nombre, refiriéndose a la capital regional, conquistada por los fundamentalistas islámicos. "Mercados, negocios y casas fueron destruidos en los fuertes combates y los bombardeos. Algunos hospitales están funcionando, pero están saturados de heridos”, indicó, agregando que las calles de Kunduz están desiertas.
Los civiles pagan las consecuencias
Niria Hotak, quien vive en la provincia de Nimruz (cuya capital, Zaranj, fue tomada), relató a DW que los talibanes están utilizando allí a "los habitantes como escudos humanos”. "Entran en las casas y piden a la gente del lugar que les den alimentos”, dijo. Y apuntó que "las fuerzas de seguridad afganas no han combatido a los talibanes y les entregaron la ciudad”. Agregó que "los funcionarios gubernamentales escaparon a Irán, pero la población local no tiene esa opción. Fue dejada a merced de los talibanes”.
Halim Sadaf Karimi, un abogado de la provincia de Jawzjan, cuya capital, Sibargan, también fue conquistada, afirmó que la gente está perdiendo la esperanza debido a los triunfos talibanes. "Los talibanes están amenazando a los civiles. Todos están preocupados. Los civiles están pagando las consecuencias de todo esto”, dice a DW.
¿Dónde quedó la comunidad internacional?
Estados Unidos ha sido blanco de duras críticas por haber abandonado Afganistán "prematuramente”. Los talibanes han capturado la mayoría de los nuevos territorios bajo su control después de que el presidente estadounidense, Joe Biden, anunciara la retirada de las tropas del país, en febrero. En ese entonces, fuentes oficiales de EE.UU. afirmaban que el ejército afgano podría defender al país de los talibanes.
"Pedimos durante meses al gobierno afgano y a la comunidad internacional que velara por la seguridad de nuestra ciudad, pero nadie prestó atención a nuestras demandas”, dice Karimi, de la provincia de Jawzjan. Por eso, considera que "la comunidad internacional también es responsable de lo que ahora está ocurriendo en Afganistán. Les dio legitimidad a los talibanes, al firmar un acuerdo de paz con ellos. Y ahora que los talibanes están cometiendo crímenes en nuestro país, la comunidad internacional ni siquiera condena esos actos”.
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¿Pueden las fuerzas afganas defender Kabul?
Assdullah Nadim, un experto en asuntos militares, dijo a DW que si la situación de fondo no cambia, "Kabul podría caer en manos talibanes" en cuestión de meses. "Pero yo creo que los talibanes se concentrarán por lo pronto en las capitales provinciales. Un ataque contra Kabul los pondría en confrontación directa con países extranjeros que aún mantienen presencia allí”, matizó.
De acuerdo con informaciones de prensa, Estados Unidos envió bombarderos B-52, naves AC-130 y jets de combate a Afganistán el sábado (07.08.2021) para ayudar a las fuerzas oficiales, cosa que los talibanes consideran una violación del acuerdo alcanzado con Washington en Doha, en 2020.
"Las fuerzas afganas enfrentan una crisis política y de gestión”, según Nadinm, quien considera "poco probable que la OTAN u otros aliados de Afganistán intervengan en la guerra afgana”. A su juicio, la comunidad internacional no ha abandonado a Afganistán, porque sigue respaldando a Kabul: "La situación actual es resultado de la mala gestión del gobierno afgano”.
(ers/cp)
Lo que queda tras la retirada estadounidense en Afganistán
Durante casi 20 años, Bagram fue el cuartel general de las fuerzas armadas de EE.UU. en Afganistán. Ahora, las bases se están retirando. Lo que queda es un montón de basura, que para algunos tiene mucho valor.
Imagen: Adek Berry/Getty Images/AFP
Basura hasta el tope
Los historiadores podrán discutir algún día sobre lo que queda políticamente de la misión de Estados Unidos en Afganistán. Ya está claro lo que "sobra" en términos prácticos: mucha basura.
Imagen: Adek Berry/Getty Images/AFP
¿Qué hacer con la basura?
Bagram ha sido el centro de mando de la misión del ejército de EE.UU. en Afganistán. Para el 20º aniversario de los atentados terroristas del 11 de septiembre, el Ejército tiene previsto retirarse por completo, es decir, en casi once semanas. Ellos pueden llevarse los equipos o dejarlos en manos de las fuerzas de seguridad en el lugar. Pero hay mucho más: basura, envases, residuos electrónicos.
Imagen: Adek Berry/Getty Images/AFP
Lo que queda de la misión
En dos décadas, más de cien mil soldados estadounidenses han servido en Bagram. Con el tiempo, la base situada a 70 kilómetros al norte de la capital, Kabul, se ha convertido en una pequeña ciudad estadounidense, con un centro comercial y restaurantes de comida rápida. En la imagen se puede ver lo que queda al final.
Imagen: Adek Berry/Getty Images/AFP
Basura para algunos, valioso para otros
El depósito de chatarra a las afueras de Bagram se ha convertido en un lugar para los recolectores de desperdicios. Acuden en masa a rebuscar en la basura para encontrar algo útil, como este hombre que encontró un par de botas militares. La esperanza es que puedan convertir esto en dinero.
Imagen: Adek Berry/Getty Images/AFP
Metal precioso bien camuflado
La chatarra informática, en particular, se almacena cerca de Bagram. Estas placas de circuitos ocultan piezas y tornillos enchufables que pueden reutilizarse. También contienen materiales valiosos como cobre y a veces incluso pequeñas cantidades de oro. Evidentemente es basura para los estadounidenses, pero en Afganistán -donde el ingreso medio anual es inferior a 500 euros- es un bien valioso.
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¿Qué será de Bagram?
Bagram, a los pies del Hindu Kush, tiene una larga historia como base militar (imagen de 2004). La base ya fue utilizada por el Ejército Rojo durante la invasión soviética de 1979. Se teme que si los estadounidenses se retiran ahora, Bagram podría caer en manos de los talibanes. Eso sería una victoria estratégica para los islamistas.
Imagen: imago images
Retirada con riesgo
La retirada de las tropas está oficialmente en marcha desde el 1 de mayo, y simplemente no hay tiempo para deshacerse de la basura. Se mantienen en reserva armas pesadas y fuerzas adicionales para posibles ataques talibanes durante la retirada militar. En el último recuento, 36 países de la OTAN y países asociados participaban en la misión, incluidos 2.500 soldados de EE.UU. y 1.100 de Alemania.
Imagen: Adek Berry/Getty Images/AFP
El poder de la mujer
Todos ayudan: una chica recoge una caja de metal abollada del depósito de chatarra. A pesar de todas las dificultades, las niñas y mujeres, en particular, se han beneficiado de la misión militar y de la caída de los talibanes en 2001. Pueden ir a la escuela y, cuando sean mayor de edad, trabajar en culquier puesto, incluso en los más altos cargos de los tribunales y otras instituciones.
Imagen: Adek Berry/Getty Images/AFP
La gente se queda preocupada
En el depósito de chatarra también se pueden encontrar muchos objetos de valor puramente sentimental. Algunas personas podrían necesitar ese consuelo ahora: alrededor de Bagram han surgido numerosos asentamientos de las fuerzas locales afganas que vivían de la base estadounidense. Muchos tienen que ver ahora qué será de ellos y de sus familias.
Imagen: Adek Berry/Getty Images/AFP
¿Qué queda?
¿Qué queda de 20 años de presencia estadounidense en el Hindu Kush, aparte de botas desgastadas y cables oxidados? "La cooperación entre Afganistán y Estados Unidos no termina", ha prometido Joe Biden durante su reunión con el presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, en la Casa Blanca. Millones de afganos tomarán la palabra al presidente estadounidense.