Basler Zeitung, de Basilea: "Las renuncias (en el ministerio de Defensa alemán) dejan entrever que la cúpula política alemana o fue engañada por el ejército o los políticos callaron el hecho para evitar escándalos durante la campaña para las recientes elecciones.

Sea lo que sea, eso va en detrimento de las misiones militares alemanas en el exterior. Ahora Jung quedó en un atolladero (del que salió con la renuncia de este viernes 27 de noviembre de 2009). Todo este es un hecho que no favorece al nuevo ministro de Defensa, Karl-Theodor zu Guttenberg que justificó la operación poco después de haber asumido el cargo recientemente. También su confianza ha quedado maltrecha."

¿Mintió Jung o su partido?

Die Welt, de Berlín: "Después de todo lo que se ha conocido puede asegurarse que el entonces ministro alemán de Defensa, Franz Jung, ha actuado después del 4 de septiembre sin mucha suerte o, por lo menos, irresponsablemente. Después de que por pedido de uno de los comandantes del Bundeswehr dos camiones cisterna con combustible fueran bombardeados el hoy ex ministro de Defensa (a hasta este 27 de noviembre ministro del Trabajo) había declarado ligeramente varias veces que 'sólo habían eliminado individuos terroristas talibanes'. Pero el mismo día de aquella operación aparecieron indicios de que había habido víctimas civiles. Aún no puede decirse con certeza si Jung mintió, antes o después. Pero lo que sí hizo fue asumir una postura que ante las nuevas informaciones de trasfondo hoy conocidas fue irresponsable."

De Manaos a Copenhague: primero hay dar ejemplo

Diario de Noticias, de Lisboa: "La tala de los bosque en el Amazonas tiene que ser frenada. Los países en desarrollo necesitan capital y tecnologías limpias para la necesaria modernización. Los países industrializados tiene que cumplir con su responsabilidad y empezar dando ejemplo. Las decisiones de Copenhague van a tener consecuencias para todos nosotros.

Editor: Pablo Kummetz