Según indicaron las autoridades costeras al diario turco Hürriyet, siete personas han sido rescatadas con vida y se han recuperado 21 cadáveres, aunque continúa la búsqueda, dado que había unas 40 personas a bordo.

La barca transportaba a refugiados o inmigrantes clandestinos, según confirmó la dirección de la vigilancia costera turca. El accidente tuvo lugar en el Mar Negro, a cuatro kilómetros de Rumeli Feneri, la punta norteña del Bósforo.

Se trataba de una embarcación "muy pequeña, prácticamente una barca de remos", según declaró al citado periódico Ali Saruhan, capitán de un pesquero que participó en las labores de rescate.

Aparentemente, la barca volcó por los fuertes vientos en el Mar Negro, y los pescadores de la zona avisaron del naufragio y han ayudado en el rescate.

La mayoría de los fallecidos son niños

"Es terrible. El mar está lleno de cadáveres. La mayoría son niños. Tenemos un niño ahogado en nuestro barco; creemos que es africano", explicó Saruhan.

Las autoridades costeras enviaron siete barcos patrulla, un helicóptero y un equipo de buzos al lugar, según una nota de la oficina del gobernador de Estambul, y el trabajo de búsqueda de supervivientes continúa.

Turquía es lugar de paso para numerosos grupos de refugiados que quieren entrar en un país de la Unión Europea, pero habitualmente los inmigrantes parten de la cosa occidental para alcanzar una de las islas griegas en el Mar Egeo.

Según "Hürriyet", la embarcación se dirigía probablemente hacia las costas de Bulgaria o de Rumanía, para lo que tenía que recorrer al menos 80 kilómetros en paralelo a las costas turcas.

CP (dpa, rtr)