Hace años que el problema se conoce y está sobre el tapete, y sin embargo, los peces siguen extinguiéndose en los mares del planeta. El consumo mundial de pescado es de cerca de 15 kilos por persona, el doble de la cantidad que podría prevenir un desequilibrio ecológico.

En Europa, la sobrepesca hace que un 80% de la población ictícola esté al borde de la extinción. La organización ecologista WWF habla de “pérdidas de 40 mil millones de euros por año debido a la sobrepesca”.

Pesca accesoria, pesca ilegal y otros males

Uno de los grandes problemas es el de la pesca accesoria. Es usual que otras especies queden atrapadas en las redes, junto a la especie que se desea pescar. Así, estos animales no deseados se vuelven a tirar al mar. Toneladas de peces y organismos marinos muertos acaban en el fondo del mar, ya sea porque su precio es bajo, y no hay cupo en los barcos para almacenarlos, o porque no se los consume. Es el caso de la pesca del lenguado y el bogavante en el Mar del Norte, de los que, por cada kilo, se descartan cerca de 6 kilos de otras especies marinas. Esto implica no sólo un desperdicio de recursos, sino también la reducción de la cantidad de peces a capturarse en el futuro, así como de animales de reproducción. Se calcula que en Europa se tira entre un 20 y un 60 por ciento de la pesca total anual. Esto mina todos los esfuerzos por conservar las especies y la salud del ecosistema.

Agudiza el problema la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR). En el Mediterráneo, según informa el portal PLos ONE de investigación científica, según estimaciones del ICCAT (Comisión para la Conservación del Atún), la pesca no reglamentada de atún azul llegó en 2007 a 28.600 toneladas, y la UE no tomó las medidas necesarias para controlarla.

La Comisión de la Unión Europea en su política pesquera común (PPC) iniciada en 2003 promueve el “desarrollo sostenible de actividades marítimas y la explotación sostenible de los recursos pesqueros de las aguas comunitarias y extracomunitarias”. A lo largo de sus 70.000 km de costas, las aguas europeas generan un 40% del PBI. El Fondo Europeo de Pesca de la Unión persigue el objetivo de garantizar la explotación sostenible de los recursos pesqueros.

Gobierno alemán reconoce errores

Como respuesta a una consulta de Cornelia Behm, vocero en política pesquera del Partido alemán Los Verdes, el gobierno alemán redactó un balance de la política pesquera europea. Según el semanario Der Spiegel “se desprende de dicho informe que los países miembros de la UE saquean los mares y no implementan medidas eficaces para detener este abuso a la naturaleza y al medioambiente.”

El gobierno no lo dice textualmente, sino que se queja de la “falta de consecuencias en caso de que se superen las cantidades de captura estipuladas”, “huecos en la red de control” y, entre otras cosas, de la “no eliminación de sobrecapacidades”, es decir, el número excesivo de flotas pesqueras, que conduce también a la sobrepesca.

El balance hace hincapié en que se está trabajando activamente para lograr mejoras en el sistema pesquero. Así, las cantidades de captura deberían estipularse basándose en lo que recomiendan las últimas investigaciones al respecto. Esto, según Der Spiegel, “podría haberse realizado hace tiempo, pero los países de la UE lo han ignorado, a menudo con el consentimiento de Alemania.”

Asimismo, el informe gubernamental habla de “prohibir lo antes posible el descarte de pescado, ya que esto obligaría a los pescadores a aplicar técnicas más selectivas.” Es decir que ya están en condiciones de poner en práctica formas de pesca que no hagan necesaria la muerte indiscriminada de toneladas de peces.

El problema reside, según el semanario, en que el gobierno alemán no plantea el problema abiertamente ante otras naciones europeas como España y Dinamarca, y no se atreve a hacer valer su peso dentro de la UE. Parecería, dice Der Spiegel, que “pesa demasiado el miedo a provocar la ira de los socios europeos y perderlos como aliados en otros temas”.

Según Cornelia Behm, iniciadora de esta consulta, “el gobierno ignora la situación catastrófica en que se encuentran los mares europeos a causa de la sobrepesca”.

Autora: Cristina Papaleo

Editora: Claudia Herrera Pahl