Un alcalde francés protestó este domingo por la difícil situación financiera de su municipio con una espectacular huelga de hambre ante la Asamblea Nacional de París. El político del partido de Los Verdes de Sevran se instaló en una tienda de campaña junto a la cámara parlamentaria, donde ya ha dormido dos noches.

"Estoy decidido a continuar, al menos hasta el martes", dijo Stéphane Gatignon, de 43 años, a los periodistas. Ese día los diputados de la Asamblea General debatirán sobre el sistema de apoyo a las ciudades y municipios pobres.

Gatignon exige un aumento de la ayuda financiera. Su municipio de Sevran necesita urgentemente cinco millones de euros adicionales para no declararse en bancarrota, asegura. La ciudad de unos 51.00 habitantes está situada al noreste de París y es una de las más pobres del país, que sufre un fuerte desempleo y problemas de seguridad. El ministro del Interior, Manuel Valls, se mostró solidario con el alcalde, pero el responsable de subvenciones a las ciudades François Lamy le exigió por el contrario que se siente a la mesa de negociaciones. (dpa)