Alemania a semifinales sin Torsten Frings
3 de julio de 2006
El jugador del Werder Bremen será sustituído muy probablemente por Tim Borowski. "La selección pondrá todo de su parte para que Frings pueda reincorporarse en el próximo partido. La suspensión de Frings será como un acicate para la selección", dijo el presidente de la Federación Alemana de Fútbol, Theo Zwanziger.
Medios alemanes calificaban como una gran pérdida la ausencia de Frings en el partido de semifinales. El desenlace tras la trifulca que se armó al acabar el partido contra Argentina, mantuvo en suspenso a los ejecutivos y cuerpo técnico de la selección en la víspera del decisivo partido. El semanario alemán Der Spiegel anunciaba la decisión de la FIFA como un 'shock' para Jürgen Klinsmann.
Además de haber sido suspendido para el siguiente partido, la comisión disciplinaria de la FIFA impuso una multa de 5.000 francos suizos. (por tener la FIFA su sede en Suiza). Frings estará bajo observación durante seis meses y pende sobre él otra suspensión si comete nuevamente una falta. El centrocampista del Werder Bremen podría jugar con la selección alemana de llegar ésta a la final o, en dado caso, a la disputa por el tercer puesto.
¿Mano negra de Italia?
"Nos parece una pena que se haya reabierto un asunto que ya se había cerrado y sobre todo, que había sido instigado por los argentinos. Tan sólo reaccionamos", dijo el seleccionador Jürgen Klinsmann. No sólo a Klinsmann le ha parecido la sanción de la FIFA sorpresiva y desmesurada, también a la afición, que ve en esto "la mano negra" de Italia.
Fueron las imágenes de la televisión de paga italiana Sender Sky, las que dieron la prueba contundente contra Frings. En las imágenes se ve al centrocampista dar un puñetazo al argentino Julio Cruz en la barbilla. Frings había negado rotundamente las acusaciones. "Yo no hice nada", dijo el jugador de 29 años en entrevista con el diario local de Baja Sajonia "Kreiszeitung Syke". "De pronto estaba yo en medio de una golpiza caótica y cuando recibí dos golpes estiré los brazos para defenderme, no hubo nada más".
Cruz resta peso a las acusaciones
El gerente técnico de la selección, Oliver Bierhoff, se mostró decepcionado con la decisión de la FIFA. "Creíamos que habíamos dado el argumento decisivo para comprobar su inocencia", dijo. "Las imágenes comprueban que el árbitro y sus dos asistentes estaban al lado de Frings y por eso suponíamos que debían ser ellos quienes tuvieran la última palabra".
El delantero argentino Julio Cruz había restado peso a las acusaciones contra Frings al declarar que no había recibido un puñetazo o por lo menos no haberlo sentido. La Federación Italiana de Fútbol, confirmó que no había pedido ninguna investigación en torno al incidente. La selección italiana mantiene reserva al respecto.