El ministro de Asuntos Exteriores de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, advirtió que el intercambio de declaraciones entre Rusia y Estados Unidos, a propósito del sistema militar que Washington planea para el Este de Europa, podría provocar "una nueva espiral de desconfianza" entre ambas potencias.

Llamado a la OTAN

Hizo un llamado dirigo a Oslo, donde se reunieron los ministros de Asuntos Exteriores de los países que conforman la Organización para el Tratado del Atlántico Norte (OTAN), para que "sigan dialogando de manera abierta con Moscú, y procedan con cautela en el proyecto militar estadounidense."

Horas antes, en Moscú, el presidente ruso, Vladimir Putin, había amenazado con desconocer unilateralmente el Tratado sobre fuerzas convencionales en Europa. Ello provocó una reacción inmediata y contundente de la secretaria de Estado de Estados Unidos, Condoleezza Rice, quien calificó la declaración de Putin como "risible". La diplomática aseguró también que "Rusia debe cumplir sus compromisos".

Estados Unidos se vio apoyado desde Oslo, por los ministros de la OTAN reunidos en la capital noruega. El secretario general de la alianza, Jaap de Hoop Scheffer, aseguró que "existe consenso entre todos los países miembros en cuanto a que el sistema militar estadounidense no puede, y no afectará, el equilibrio en Europa."

¿Nueva Guerra Fría?

Parte de la opinión pública europea ve en el tono de las declaraciones entre Rusia y Estados Unidos el posible reinicio de la Guerra Fría. Pero es un hecho que algunos países de la propia OTAN se han negado a ratificar el documento, pues no se ha cumplido una de sus condiciones primordiales: que las fuerzas rusas salgan de Georgia y Moldavia.

Por ello, las primeras reacciones de de Hoop ante el anuncio de Putin consistió en manifestar que no hay divisiones en la alianza atlántica. El Tratado sobre Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (CFE, por sus siglas en inglés), es uno de los acuerdos más importantes para el control del desarme.

Historia del tratado

El pacto se fraguó el 19 de noviembre de 1990 entre los entonces 16 países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y el Pacto de Varsovia, que abarcaba a todos los Estados socialistas de Europa del Este excepto la antigua Yugoslavia.

En un principio, el objetivo era eliminar los desequilibrios entre los socios respecto a las fuerzas armadas convencionales e imposibilitar los ataques sorpresa. Así, el tratado imponía límites a la capacidad armamentística en las categorías de carros de combate, vehículos acorazados de combate, artillería, aviones de combate y helicópteros de combate. Más de 50.000 armas fueron destrozadas bajo supervisión internacional.

¿Retiro de Putin?

En su mensaje a la nación rusa, Putin hizo otro anuncio que repercutió, sobre todo en el ámbito interno. Informó que no se presentará a una nueva candidatura presidencial Dijo que el próximo discurso de este tipo, en la primavera de 2008, "lo dará un nuevo presidente".

El mandatario se ha visto presionado por parte de la nomenklatura que lo rodea, para que impulse una reforma constitucional que le permitiría llegar a un tercer mandato.