Alemania: aumenta la inquietud por el desconfinamiento
10 de mayo de 2020
Imagen: Reuters/C. Mang
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En Alemania se registran las primeras señales de preocupación pocos días después de decretarse el comienzo de un regreso paulatino a la normalidad ante la pandemia de coronavirus, en momentos en que otros países, como Francia y España, también empezarán el desconfinamiento.
El Instituto Nacional de Virología Robert Koch, encargado del monitoreo de la pandemia, informó este domingo (10.05.2020) sobre un aumento de la tasa de infección, por encima de la considerada potencialmente peligrosa, de 1 a 1,1.
Esta tasa, llamada de "reproducción", mide la media de personas que alguien infectado por COVID-19 contaminará. Un índice menor a 1 sugiere que la cantidad de infecciones en el país tiende a disminuir, en tanto que por encima de este número señala un alza. Esta cifra pasó de 0,7 a más de 1 en apenas unos días.
No obstante, el instituto advirtió que todavía es demasiado pronto para sacar conclusiones, pero en un informe indicó que las cifras de infección deben "ser controladas muy de cerca en los próximos días". Este domingo, Alemania registraba un total de 169.218 contagios, con 667 nuevos casos en las últimas 24 horas, lo cual es relativamente bajo respecto al promedio de las últimas semanas.
La cifra de muertes ha sido de 7.395, es decir, una tasa del 4,4 por ciento, inferior a la de la mayoría de los otros países más afectados por coronavirus. En este contexto, las autoridades anunciaron el miércoles un regreso paulatino a la normalidad en el país, tras un comienzo de desconfinamiento desde el 20 de abril, en particular con la reapertura de escuelas primarias y restaurantes.
Los nuevos focos de contaminación son hogares para ancianos y establecimientos de transformación industrial de carne, que emplean a trabajadores extranjeros, a veces en condiciones de higiene dudosas. Varios de estos lugares han sido clausurados y se ordenó realizar pruebas de detección masivas en este sector. (AFP)
Coronavirus en Alemania: las peluquerías reabren sus puertas
Seis semanas de cuarentena son mucho tiempo para el cabello: desde el 23 de marzo, las peluquerías alemanas estaban cerradas. A partir de este lunes (04.05.2020) los profesionales vuelven a cortar el cabello.
Imagen: Reuters/Y. Herman
Tijeras en acción
Tras seis semanas de espera debido a las medidas de confinamiento para detener el avance del nuevo coronavirus, los salones de peluquería en Alemania vuelven a atender a clientes, y las listas de espera son largas. Cerca de un 43 por ciento de los alemanes dijo "haber echado de menos o haber echado mucho de menos" un corte de cabello profesional.
Imagen: picture-alliance/dpa/I. Fassbender
Solo con tapabocas
Pese a que un cuarto de los alemanes asegura preocuparse de que podría contagiarse con COVID-19 en una peluquería -de acuerdo con una encuesta de YouGov-, está dispuesto a ir. Las medidas de seguridad son altas: es obligatorio usar mascarilla y dejarse lavar el cabello, además debe respetarse la distancia mínima entre los clientes. El sector estima que esto hará aumentar los precios.
Imagen: DW/D.Engel
80.000 salones para 80 millones de alemanes
En Alemania hay alrededor de 80.000 salones de peluquería. En total, unas 240.000 personas trabajan en el sector y muchas de ellas no reciben un sueldo justo. Tan solo unos 37.500 profesionales del cabello trabajan en situación de precariedad laboral, muchos por ejemplo no ganan más de 450 euros al mes.
Imagen: DW/S. Kinkartz
Trabajo de mujeres
También el volumen de ventas de la mayoría de las peluquerías está por debajo del promedio de los oficios manuales o artesanales: los ingresos anuales correspondientes a un empleado rondan los 28.000 euros. El promedio de todos los oficios manuales juntos es de 126.000 euros. Asimismo, la peluquería sigue siendo un oficio ejercido sobre todo por mujeres.
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Una especie de terapeutas
Y eso que uno de los grandes del sector de cosméticos para cabellos, la empresa Henkel, matriz de Schwarzkopf, opina que "aparte de dominar el arte de crear cabello hermoso, los peluqueros también son amigos, escuchan atentamente a sus clientes e incluso algunas veces sirven como terapeutas". Henkel calcula una fuerte caída de la cifra de ventas para el primer trimestre.
Imagen: DW/D.Engel
Los bigotes seguirán creciendo
Los barberos deberán seguir respetando ciertas medidas de seguridad: hasta nuevo aviso, no podrán rasurar ni recortar las barbas y los bigotes de sus clientes del sexo masculino. De acuerdo con el periódico Frankfurter Allgemeine Zeitung, el rasurado representa entre un 40 y un 50 por ciento del volumen de ventas de los salones de peluquería para hombres. (VT/JOV)
