En Berlín, el Consejo Alemán de Prensa presentó su informe anual para 2023. La buena noticia es que "en temas importantes como las guerras en Israel y Gaza, así como en Ucrania, los medios impresos y en línea han hecho un trabajo en gran parte impecable", afirmó su portavoz, Kirsten von Hutten.

La mala noticia es que nunca ha habido tantas amonestaciones públicas por violaciones del código de prensa. En 2022 fueron 47 y un año después, 73. A menudo obedecen a que no se protegió debidamente el derecho de víctimas de delitos, porque se publicaron sus fotografías sin su consentimiento o, en caso de muerte, sin el permiso de sus familiares.

Quejas sobre manifestaciones propalestinas

Hasta la fecha, el Consejo de Prensa alemán no ha emitido ni una sola amonestación en relación con los informes sobre la guerra en Oriente Medio y el ataque ruso a Ucrania. Desde el ataque terrorista del grupo radical islámico Hamás en Israel el 7 de octubre de 2023 y la posterior guerra en Gaza, hasta finales de año ha habido 83 quejas de lectores. Aún queda por revisar 24 casos de manera concluyente.

Lo sorprendente para el Consejo es que dichas quejas a menudo no se referían a informes de las zonas de guerra, sino a artículos sobre manifestaciones propalestinas en Alemania. Por ejemplo, por un titular que incluía la palabra "Juden-Hasser” o "antisemita”, en el que, según los lectores que se quejaron, se sugiere que todos los presentes en una determinada manifestación eran antisemitas. Desde su punto de vista, fue una manifestación por la paz.

La responsable del Consejo de Prensa, Sonja Volkmann-Schluck, no está de acuerdo con esa valoración, porque en el texto en cuestión se habría dejado claro que en esas manifestaciones se habrían realizado declaraciones antisemitas y negado el derecho de existencia de Israel.

Por otro lado, disminuyó el número de quejas sobre artículos sobre la guerra de Rusia contra Ucrania y sus consecuencias. En 2022, fueron solo 37, la mitad que en el primer año de la guerra. El Consejo dio dos veces indicaciones a equipos editoriales que, a diferencia de la amonestación, no se publican.

Confuso: "Rusia amenaza con un primer ataque nuclear"

En un caso se trató de un diario que publicó un artículo en la plataforma "Twitter”, ahora rebautizada como "X”: "Rusia amenaza con lanzar un primer ataque nuclear”. Desde el punto de vista del Consejo, el titular era engañoso y sensacionalista, ya que en "en el texto quedó entonces claro que sólo un experto ruso en política exterior exigía (un ataque nuclear)”, explicó Volkmann-Schluck.

No es responsable de televisión y radio

El número total de quejas sobre artículos publicados en la prensa impresa y en línea aumentó de 1.733 a 1.850 en 2023. Al comienzo de la pandemia de COVID-19, eran más del doble. En 2023, el Consejo de Prensa Alemán solo abordó las inquietudes planteadas en 531 casos.

En su opinión, en todos los demás no se apreció, a primera vista, ninguna violación del código de prensa, o eran quejas sobre reportajes de radio y televisión. El consejo no es responsable de ambos medios.

Transparencia y cultura del error

El Consejo Alemán de Prensa es una organización de autorregulación voluntaria, fundada en 1956. Está financiada por varias organizaciones de editores y periodistas y por el Gobierno alemán. De cara al año 2024, creen que habrá mucho trabajo, debido a la continua cobertura de las guerras, las elecciones europeas y las presidenciales en EE.UU.

Con respecto a las elecciones estadounidenses, von Hutten afirmó que "el resultado podría tener un impacto decisivo en la estructura política de Alemania", motivo por el que apeló, sobre todo, a la responsabilidad de editores de periódicos y de Internet de informar de manera meticulosa y veraz. "Esto incluye transparencia en los informes, corrección de errores del equipo editorial y comunicación con los lectores", afirmó. Trabajar con esmero genera confianza, subrayó von Hutten.

(rmr/ers)