El ultraderechista austriaco Martin Sellner se pasó el lunes burlándose de destacados políticos alemanes, mientras desafiaba un plan para prohibirle la entrada a suelo alemán. El líder del Movimiento Identitario austriaco, que retransmitió en directo su viaje de dos horas en un coche alquilado hasta la frontera alemana, publicó regularmente videos en las redes sociales después de prometer que se tomaría un café en la ciudad bávara de Passau, justo al otro lado de la frontera.

La acción, aplaudida por un puñado de simpatizantes al borde de la carretera, culminó con un breve encuentro con la policía alemana, que le dejó pasar a Baviera. Enseguida grabó otro video, en el que daba sarcásticamente las gracias a la ministra alemana del Interior, Nancy Faeser, y al canciller Olaf Scholz.

Sellner, de 35 años, atrajo la atención pública a principios de enero, cuando se supo que había sido uno de los principales oradores en una reunión de extremistas de derecha celebrada en Potsdamel pasado noviembre, a la que también asistieron miembros de la ultraderechista Alternativa para Alemania(AfD). Allí presentó un "plan maestro" para "repatriar" a la fuerza a extranjeros de Alemania, incluidos los titulares de pasaportes alemanes de origen foráneo.

La semana pasada se desencadenó una nueva oleada de interés por Sellner cuando la portavoz en materia de antifascismo del partido La Izquierda, Martina Renner, pidió al gobierno que confirmara públicamente si estaba considerando la posibilidad de prohibir a Sellner la entrada en Alemania. Funcionarios del Ministerio del Interior confirmaron a la diputada que se estaba estudiando dicha posibilidad. Entretanto, la ciudad de Potsdam ha confirmado que sus autoridades también estaban evaluando si la concentración en la ciudad constituía un "peligro para la seguridad y el orden público."

Medios legales contra el fascismo

La Ley de Libre Circulación de la UE permite a los Estados miembros denegar la entrada a personas por motivos de "orden público o seguridad", aunque añade: "Debe existir una amenaza real y suficientemente grave para el orden público, que afecte a los intereses fundamentales de la sociedad."

Renner cree que Sellner representa una amenaza de este tipo: "La participación en reuniones en el territorio de la República Federal de Alemania para planificar y llevar a cabo millones de expulsiones de personas de Alemania viola estos intereses fundamentales de manera elemental", afirmó.

Pero Stefan Martini, investigador de Derecho Público de la Universidad de Kiel, se muestra escéptico sobre si existen motivos suficientes para prohibir a Sellner la entrada en el país. "Dependería de lo concretos que se consideraran estos planes de remigración", dijo. "¿Contaría esto como un llamamiento a la subversión en Alemania? Si es así, entonces la prohibición podría estar justificada, pero si se piensa que son sólo los escenarios abstractos que describió, entonces la entrada del Sr. Sellner probablemente no se consideraría lo suficientemente peligrosa."

Suspender la libertad de circulación en la UE

Otros países han considerado a Sellner una amenaza en el pasado. Tanto Estados Unidos como el Reino Unido denegaron la entrada a Sellner en 2018 y 2019, respectivamente, tras enterarse de que había mantenido contacto directo con Brenton Tarrant, el terrorista australiano que asesinó a 51 musulmanes en una mezquita de Christchurch (Nueva Zelanda) en marzo de 2019. La organización de Sellner, el Movimiento Identitario, también había recibido una donación de Tarrant.

Pero la UE tiene criterios más estrictos, especialmente para los ciudadanos de la UE como Sellner, que goza del derecho de libre circulación. "Simplemente por la normativa europea, Alemania es mucho más estricta", dijo Martini. "La persona debe ser oída, los motivos por los que se le impone una prohibición deben quedar claros: las restricciones legales a una decisión de este tipo son mucho más estrictas en Alemania que en otros países".

(gg/ers)