La Confederación alemana de Mayoristas y Comercio Exterior (BGA) se pronunció hoy en contra de restringir la importación de textiles chinos, medida que estudia estos días la Comisión Europea (CE). "Las reflexiones de la Comisión afectan a la libre disposición de los importadores alemanes y europeos. Los contratos de compra con los proveedores chinos se cerraron hace meses y hay que cumplirlos", afirmó hoy el presidente de la BGA, Anton Boerner. Agregó que si la CE decide restringir la importación de textil procedente de China el sector textil alemán se resentirá y las consecuencias en el mercado laboral serán negativas.

Boerner opinó que la sólo creación por parte de la CE de una comisión de investigación "viola de forma flagrante el espíritu de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y vuelve a situar en un primer plano los defensores del proteccionismo". La CE estudia, a petición de trece países europeos, una posible instauración de medidas de salvaguarda que limiten las importaciones de textil de China, que en ciertos productos aumentó más de un 534 por ciento desde el pasado 1 de enero, cuando la UE suprimió las cuotas a la importación de ese producto. Según el acuerdo de adhesión de China a la OMC, firmado en el 2001, el incremento de sus exportaciones debe estar limitado hasta 2008 al 7,5 por ciento anual con respecto al año precedente.