Este viernes (02.09.2011) en Gelsenkirchen, contra la selección de Austria, los alemanes contarán nuevamente con su más importante jugador creativo, Mesut Özil del Real Madrid, y compensarán la ausencia de Sami Khedira otorgándole una nueva oportunidad al mediocampista del Bayern Múnich Toni Kroos, para que acompañe en las labores defensivas a su colega de equipo Bastian Schweinsteiger.

El entrenador nacional, Joachim Löw, informó también que el único delantero definido será Miroslav Klose, y que como lateral derecho probará a Benedikt Höwedes, defensor central del Schalke. Lo que aún no está definido es si Lukas Podolski tendrá un cupo en el plantel titular, o si el volante ofensivo del Leverkusen André Schürrle jugará desde el primer minuto.

Nada de experimentos

En el partido amistoso contra Brasil, celebrado hace casi un mes en Stuttgart, Alemania obtuvo una vistosa victoria con un planteamiento experimental bastante ofensivo; la formación 4-1-4-1, en la que Toni Kroos y el juvenil talento del Dortmund Mario Götze movieron los hilos creativos del equipo, dejó una muy buena impresión y abrió campo a las especulaciones sobre la titularidad garantizada del segundo en futuros encuentros.

Sin embargo todos aquellos que soñaron con ver una Alemania volcada completamente al ataque contra Austria, de la mano de una pareja muy prometedora conformada por Götze y Özil (quien estuvo ausente contra Brasil), tendrán que esperar algún tiempo.

Joachim Löw, pensando en asegurar lo más pronto posible la clasificación a la Eurocopa 2012, para lo cual sólo se necesita un empate en Gelsenkirchen, decidió continuar por la senda que tantas alegrías le deparó a Alemania en el Mundial del 2010 y en los partidos de la eliminatoria al máximo torneo europeo de selecciones: un 4-2-3-1 con dos volantes de contención, un creativo por el medio, dos atacantes por las bandas y un único delantero definido.

 Un libro y un contrato se roban el show

Curiosamente en la preparación de un partido tan decisivo, el fútbol pasó a un segundo plano; en su lugar dominaron las noticias deportivas las reacciones al interior de la selección en torno a la polémica autobiografía del capitán Philipp Lahm, así como la contratación de última hora del defensor central Per Mertesacker por el Arsenal de Inglaterra.

Sobre el libro “La sutil diferencia” el entrenador Joachim Löw y el consejo de jugadores del equipo nacional se reunieron con su autor, para determinar si a través suyo se hicieron públicas informaciones internas de la selección. Tras la conversación Löw ratificó a Lahm como capitán y expresó que si bien algunos apartes de la autobiografía eran “desafortunados”, ésta no reveló secretos del equipo.

En cuanto a Per Mertesacker, el jugador recibió autorización esta semana para tomarse todo un día libre de la concentración de la selección a así arreglar los detalles de su contratación por parte del Arsenal, algo que Löw calificó como un reconocimiento al fútbol alemán, que a la vez se beneficia de la presencia del defensor en el fútbol inglés, lo que según el entrenador es “un paso enorme”.

Austria con muchos “alemanes”

Los austriacos, convencidos de poder dar una sorpresa ante Alemania que les permita conservar las esperanzas de clasificar a la Eurocopa 2012, convocaron para el partido en Gelsenkirchen a ocho jugadores activos actualmente en la Bundesliga: Marko Arnautovic (Bremen), Emanuel Pogatetz y Daniel Royer (Hannover). Christian Fuchs (Schalke), David Alaba (Bayern Múnich), Julian Baumgartlinger (Maguncia), Martin Harnik ( Stuttgart) y Erwin Hoffer (Frankfurt).

Las perspectivas, de todas formas, no son alentadoras para Austria, que desde hace 25 años no derrota a Alemania, donde pese a que un empate es suficiente la afición espera una contundente victoria.

Autor: Daniel Martínez
Editor: Claudia Herrera