Alemania: disputa por un estudio sobre racismo en la Policía
Ralf Bosen
7 de julio de 2020
Con su decisión de cancelar un estudio sobre tendencias racistas en la Policía alemana, el ministro del Interior causó una tormenta de indignación. No solo entre los oponentes políticos.
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Desde la muerte del estadounidense George Floyd, el tema del racismo y la violencia policial ha estado en el centro de atención también en Alemania. Según la mayoría de los políticos, la Policía en Alemania en general no tiene un problema de racismo. Sin embargo, a menudo hay casos de policías que se comportan abiertamente de manera racista.
Los casos se repiten. Por ejemplo, al controlar a personas sin una razón específica, solo por el color de su piel u otras características externas. El llamado "racial profiling" está prohibido, pero existe.
Con el fin de evaluar con mayor precisión el "racial profiling" en Alemania, los ministros de Justicia e Interior anunciaron en junio un estudio independiente.
Enfrentamiento con la ministra de Justicia
Sin embargo, el ministro federal del Interior, Horst Seehofer (CSU), canceló el estudio sobre las tendencias racistas en la policía. Su Ministerio anunció que Seehofer no ve "necesidad" de tal investigación. Según él, ya existen centros de denuncia en la Policía, y "los casos individuales de discriminación" son "investigados sin piedad y sancionados con rapidez". Además, el trato discriminatorio está prohibido en la práctica policial de todos modos. Esa argumentación de que no puede ser lo que no debe ser, generó un amplio rechazo. Las críticas provienen de muchos lados. No solo de la oposición.
Seehofer es criticado hasta en el gabinete federal. La ministra de Justicia, Christine Lambrecht (SPD), insiste en atenerse al estudio originalmente planeado. Lambrecht dijo que volvería a hablar con Seehofer sobre si tal estudio no sería de interés para todos los que respetan y defienden los valores de la Constitución. No se trata de poner a nadie bajo una sospecha general. Se trata más bien de "conocer el estado de las cosas y saber dónde estamos y cómo podemos seguir actuando".
Una "justificación vergonzosa"
Seehofer podría sentirse particularmente herido por la dura reacción de la Policía. Sebastian Fiedler, presidente de la Asociación de Investigadores Criminales Alemanes (BDK), declaró en la cadena de televisión alemana ARD: "Encuentro la justificación que he escuchado algo vergonzosa, porque por supuesto no es concluyente. Y también hace un mal servicio a las propias autoridades de seguridad".
La ex ministra federal de Justicia Sabine Leutheusser-Schnarrenberger igualmente criticó al ministro Seehofer: "Necesitamos una base clara para el #RacialProfiling, para que sepamos de qué estamos hablando y no hagamos juicios radicales. El estudio tiene sentido, lo que no tiene sentido es que el Ministro del Interior se niegue", escribió en Twitter.
Seehofer se elogia a sí mismo
El propio Ministro alemán del Interior no parece muy impresionado por las críticas. Seehofer subrayó que desde que asumió el cargo en 2018, "se ha hecho más contra el antisemitismo y el extremismo que en todos los años anteriores". Al mismo tiempo, el político del partido CSU subrayó que no veía un problema estructural ni en la administración pública ni en la policía federal.
Advertencia de los expertos de la UE
El estudio sobre el trato discriminatorio fue propuesto por la Comisión Europea contra el Racismo y la Intolerancia (ECRI) en su reciente informe sobre Alemania. El Consejo de Europa había denunciado el racismo generalizado e institucional en Alemania después de que se publicara el informe a mediados de marzo. Los expertos de la ECRI encontraron varios indicios de que el trato discriminatorio es muy común entre los policías alemanes. En Alemania la Policía todavía tiene una reputación relativamente buena. Según el Eurobarómetro de la Comisión Europea, en otoño de 2019, alrededor del 85 por ciento de los alemanes confiaba en la Policía, mientras que cerca del 12 desconfiaba de ella. El Eurobarómetro se publica dos veces al año e incluye encuestas de opinión pública de todos los Estados miembros de la UE sobre diversos temas.
(gg/er)
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Protestas contra racismo en cinco continentes
La muerte de George Floyd de Minneapolis conmueve a todo el mundo. A pesar de la pandemia, cientos de miles de personas han decidido tomarse las calles y manifestar contra el racismo sistémico.
Imagen: picture-alliance/Photoshot/A. Morissard
París: Protesta en el Campo de Marte
Unos días atrás la policía francesa había dispersado a los manifestantes con gas lacrimógeno, y las manifestaciones en la Torre Eiffel y frente a la embajada de EE. UU. anunciadas para el sábado también habían sido prohibidas. Sin embargo, decenas de miles salieron a las calles para protestar contra el racismo, incluso más allá de París.
Imagen: picture-alliance/Photoshot/A. Morissard
Lieja: manifestación a pesar de la prohibición
Bélgica, como la mayoría de los países europeos, participó en la explotación de colonias en otros continentes: la actual República Democrática del Congo fue una vez propiedad privada del Rey Leopoldo II, en cuyo nombre se estableció allí un régimen racista de injusticia. En Bruselas, Amberes y Lieja hubo manifestaciones contra el racismo, a pesar de las prohibiciones por la pandemia.
Imagen: picture-alliance/abaca/B. Arnaud
Múnich: marcando el paso
Una de las mayores manifestaciones de Alemania tuvo lugar en Munich, donde se reunieron 30.000 personas. Otras grandes manifestaciones tuvieron lugar en Colonia, Fráncfort y Hamburgo, entre otros lugares. En Berlín, la policía tuvo que bloquear temporalmente las vías de acceso al Alexanderplatz porque demasiada gente acudió a la marcha.
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Sofía: Más de diez opositores al racismo
Al igual que en muchos otros países europeos, Bulgaria prohíbe actualmente los mítines con más de diez participantes. Sin embargo, cientos se reunieron en la capital Sofía. Aparentemente gritaron las últimas palabras de George Floyd "No puedo respirar", pero también llamaron la atención sobre el racismo en la sociedad búlgara.
Imagen: picture-alliance/AA
Turín: protesta en tiempos de pandemia
Esta mujer de Turín grapó su preocupación política a la mascarilla: "Las vidas negras también cuentan en Italia". Las manifestaciones, incluidas las de Roma y Milán, probablemente sean las mayores reuniones desde que comenzaron las medidas contra el coronavirus. Italia es uno de los principales países receptores de migrantes africanos de la Unión Europea.
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Lisboa: ¡Actuad ya!
"¡Actuad ya!", es lo que dice en la pancarta de estos manifestantes en Lisboa. Aunque el evento no había sido autorizado, la policía permitió que los participantes siguieran adelante. En Portugal también hay casos de violencia policial contra negros. En enero de 2019, cuando cientos de personas se manifestaron espontáneamente tras un incidente de este tipo, la policía disparó con balas de goma.
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Ciudad de México: Floyd y López
En México, no es sólo la muerte de George Floyd lo que está perturbando al país, sino también el destino similar del albañil Giovanni López: fue arrestado en mayo en el estado occidental de Jalisco porque no llevaba una mascarilla, y aparentemente murió por violencia policial. Desde que apareció un video de la operación hace unos días, la ira de los manifestantes mexicanos ha ido creciendo.
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Sídney: racismo contra los aborígenes
Las protestas en Sídney comenzaron con una ceremonia tradicional de humo. En este caso, la solidaridad de los al menos 20.000 participantes se dirigió expresamente no sólo a George Floyd, sino también a los australianos de la población aborigen, que también fueron víctimas de la violencia policial racista. Los manifestantes exigieron que ninguno de ellos muriera ya bajo custodia policial.
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Pretoria: Con el puño en alto
El puño levantado en el aire es un símbolo del movimiento #BlackLivesMatter. Pero el símbolo es mucho más antiguo: cuando el régimen del apartheid en Sudáfrica liberó al luchador por la libertad Nelson Mandela de la prisión en febrero de 1990, levantó el puño en su camino hacia la libertad, al igual que este manifestante en Pretoria ahora. En Sudáfrica, los blancos siguen siendo privilegiados.