La Policía y el Ejército alemanes cooperarían en el interior, en caso de terrorismo. DW habló al respecto con el constitucionalista Joachim Wieland sobre el probable y polémico despliegue del Bundeswehr.
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DW: La Constitución alemana solo permite la acción del Ejército en el interior en caso de "accidentes muy graves". Ahora, el Bundeswehr realizó un ejercicio en común con la Policía, para hacer frente a un atentado terrorista. ¿Es eso legal?
Joachim Wieland: El Tribunal Constitucional Federal amplió ese campo de acción en un fallo del 2012, especificando que ese "accidente grave” también puede ser uno provocado, como los que cometen terroristas. El Tribunal dijo además que el Ejército puede operar preventivamente, en cooperación con la Policía, para evitar un daño grave.
¿Vamos a tener que acostumbrarnos a ver soldados armados en las calles?
No. El desastre tiene que ser muy grande como para que no sean suficientes las fuerzas de la policía local, la federal y la de fronteras. Hasta ahora, no hemos experimentado ningún evento grave que lo haga necesario.
¿Con qué argumentos se ha pedido la ampliación de las competencias del Bundeswehr?
El Tribunal Constitucional Federal ha argumentado solo desde el punto de vista jurídico. La realidad es que el Ejército tiene una mayor capacidad que la Policía para realizar algunas cosas, como desactivar bombas, por ejemplo.
El Ejército alemán parece estar dispuesto a brindar protección en Alemania, y no solo en Afganistán o Mali…
Tanto en el Ejército como en la política existe la disposición a que las tropas alemanas asuman tareas adicionales. Un curso que requerirá recursos y fondos financieros adicionales. Pero dicho curso no puede chocar con la fundada renuencia de la Constitución de utilizar las tropas en el interior.
Casi tres cuartas partes de los alemanes aprueban la ayuda del Ejército, en caso de un ataque terrorista. ¿Dudan los ciudadanos de las capacidades de la Policía?
Creo que es más la sensación de que el terrorismo nos amenaza y tenemos que aunar fuerzas para protegernos. Sin embargo, algunos olvidan que la Policía es la institución preparada para velar por la seguridad interna, mientras el Ejército está preparado para misiones de combate, más allá de las fronteras. Pero el miedo al terrorismo es mayor que la razón, por eso no es un buen consejero.
Joachim Wieland es profesor de derecho público y rector de la Universidad de Ciencias Administrativas de Speyer. Wieland fue asistente de investigación en la Corte Constitucional Federal.
Proyectos militares fallidos (05.06.2013)
Los fiascos no son inusuales en los proyectos de defensa. El escándalo en torno al “Euro Hawk”, que ha puesto en aprietos al ministro de Defensa alemán, es sólo el último ejemplo.
Imagen: picture-alliance/dpa/A.Schalit
El submarino que no flotaba
En 2013, expertos españoles que trabajaban en la construcción de cuatro submarinos S-80 descubrieron que el sumergible probablemente no podría flotar por problemas de diseño. Al reformular el proyecto, agrandaron la máquina, que pasó a ser un S-80 Plus. Em 2018 se descubrió que el problema ahora es que el submarino será tan grande que no entrará en su base, que deberá ser agrandada.
Imagen: picture-alliance/dpa/W. Pfeiffer
Más velocidad, más eficacia
Alcanzar la mayor eficacia suele ser el cometido de los grandes proyectos de defensa, también en Alemania. Pero el caso del dron “Euro Hawk” no es el primero que termina en un fiasco. Muchos proyectos han resultado demasiado caros, o simplemente no han funcionado. Aquí recopilamos algunos ejemplos, desde el de un submarino no apto para agua salada, hasta el de un avión propenso a estrellarse.
Imagen: Reuters
Tanque en miniatura
El tanque HS 30 inició una serie de proyectos de defensa fallidos. A mediados de la década del 50 , el entonces ministro germano de Defensa Franz Josef Strauss encargó varios miles, después de haber visto solo un modelo de madera. Pero los vehículos resultaron demasiado estrechos y sus cadenas demasiado débiles. Además, el sistema de refrigeración era inadecuado.
Imagen: Bundesarchiv, B 145 Bild-F027418-0012 / Berretty / CC-BY-SA
Starfighter: misión suicida
El siguiente fiasco tuvo consecuencias más graves. En 1958, Strauss equipó a la Fuerza Aérea alemana con naves F-104 Starfighter, de Lockheed. De 916 aviones, 269 se accidentaron. Hasta 1984 murieron en total 116 pilotos de estos Starfighter, que llegaron a ser conocidos como “productores de viudas”. En una auditoria se acusó a Strauss de haber dilapidado miles de millones de marcos alemanes.
Imagen: picture-alliance/dpa
Submarino alérgico al agua salada
Los primeros submarinos alemanes de postguerra, del tipo 201, eran supuestamente los más modernos de su clase. Pero poco después de entrar en servicio se detectaron fisuras en sus paredes exteriores: el acero no era resistente al agua de mar. El problema se superó con la próxima generación de submarinos, del tipo 205. Afortunadamente, éstos podían sumergirse sin correr riesgo de disolverse.
La serie de contratiempos de las Fuerzas Navales alemanas continuó con el buque de combate “Korvette 130”, que todavía no está completamente operativo. Desde su estreno, en 2008, ha deparado varias sorpresas ingratas: tornillos sueltos y armamento inapropiado fueron solo algunos de los múltiples problemas. Se espera que los trabajos para corregir esos defectos terminen en 2014.
Imagen: picture-alliance/dpa
El costoso Eurofighter
En 2003, el entonces canciller Gerhard Schröder se subió orgulloso a la cabina de un Eurofighter, el hasta entonces más costoso proyecto del ejército y la aviación. Pero un jet de combate se estrelló en un vuelo de prueba. Falló el mecanismo de dirección. En 2010 los sistemas de eyección de los asientos. Finalmente, el costo por jet se elevó de 50 a 90 millones de euros.
Imagen: picture-alliance/dpa
El tigre sin dientes
El helicóptero de combate “Tigre” también entró en funciones más tarde de lo previsto y su costo fue mayor que el inicialmente calculado. Oficiales del ejército dijeron que no era apropiado para el combate en Afganistán, porque su armamento no era suficiente para defender de ataques a soldados en tierra. Ahora ya no se lo denomina oficialmente "helicóptero de combate".
Imagen: picture-alliance/dpa
Cuestión de tiempo
También algunos proyectos actuales están causando dificultades. Se prevé que el Airbus A400M reemplace en algunos países europeos a otros aviones de carga más antiguos, como el Transall. El nuevo Airbus debería estar en función desde hace largo tiempo, pero numerosos problemas técnicos han obligado a postergar su entrega. Ahora, Alemania espera recibir la totalidad de sus A400 hasta 2020.