Las víctimas de maltratos en orfanatos de la desaparecida República Democrática Alemana (RDA) recibirán la misma indemnización que víctimas de hogares para niños y jóvenes en la República Federal de Alemania, según lo anunciado en un informe que detalla la violencia y los métodos cruentos a los que fueron sometidos muchos ciudadanos de la Alemania comunista en dichas instituciones.

El documento, pensado como instrumento para la elaboración de los traumas y para poner en marcha la recuperación de las víctimas, es resultado de un estudio presentado por los ministerios alemanes de Familia e Interior, así como por ministerios de los Estados del Este de Alemania. El estudio fue realizdo por un grupo de trabajo conjunto de la Federación y los Länder, y contiene además informes personales de las víctimas. Las indemnizaciones serán destinadas, entre otras cosas, a financiar tratamientos terapéuticos y cuidades de salud.

Miles de niños y jóvenes que vivieron en orfanatos de la ex RDA hasta 1989, en especial en hogares para niños y reformatorios para adolescentes, fueron víctimas de maltratos y violencia y vivieron en condiciones infrahumanas. La labor en los 474 orfanatos estatales, 38 hogares especiales para niños y 32 reformatorios, especialmente en el “taller para jóvenes” de Torgau, fue concebida con un objetivo político, el de reformar la personalidad de los internados y hacerlos compatibles con el régimen de la RDA.

Traumas por abusos

Las instituciones estaban a cargo del ministerio de Educación Popular, es decir, desde 1963, bajo la tutela de la ministra Margot Honecker, esposa del jefe de Estado y secretario general del Partido Socialista Unificado (SED), Erich Honecker. La reeducación de los jóvenes se llevaba a cabo por medio de un adiestramiento de tipo militar y de una inserción coercitiva en el colectivo del sistema comunista. Como consecuencia de ese adoctrinamiento, de las torturas mentales y del abuso físico, psíquico y moral, las víctimas acarrean hasta hoy traumas difíciles de elaborar.

Durante la presentación del informe, los ministros de los Estados del Este de Alemania anunciaron la creación de centros de información y asesoramiento para las víctimas. La ministra de Asuntos Sociales de Turingia, la socialdemócrata Heike Taubert (SPD), informó que ya se habían registrado unas 570 personas en el centro de ese Estado federado, y manifestó estar agradecida, ya que el fondo podría aliviar “la difícil situación” por la que pasan muchos de los que vivieron en orfanatos de la RDA.

La ministra de Asuntos Sociales de Mecklemburgo-Pomerania Occidental, Manuela Schwesig (SPD), dijo que no se enteró de las injusticias cometidas en los orfanatos sino hasta asumir su cartera. “Me avergüenzo y estoy muy dolida”, dijo. La era del silencio parece haber llegado a su fin. La ministra de Juventud de Brandeburgo, Martina Münch, también una socialdemócrata, dijo que en la RDA no hubo muchos hogares bajo responsabilidad de la Iglesia. Pero, al mismo tiempo, subrayó que se sabe muy poco acerca de las instituciones eclesiásticas.

Autora: hf/cp (dpa, kna, epd)
Editor: Pablo Kummetz