La última noche del año en Alemania se saldó con numerosos heridos y dos muertos por petardos, más enfrentamientos contra la Policía, según el primer balance elaborado este lunes (1.1.2018). Dos hombres de Brandeburgo, en el este de Alemania, perdieron la vida al manipular artefactos explosivos para celebrar la llegada del año nuevo. Uno de 35 murió cuando encendió un petardo, informó un portavoz de la Policía. A pesar de la ayuda pereció de las graves heridas en el lugar de los hechos. Y un joven de 19 años que quería encender unos fuegos artificiales elaborados por él mismo, según datos de las autoridades, resultó herido en la cabeza y murió.

Junto con estas dos víctimas mortales, numerosas personas resultaron heridas en Alemania como suele ser habitual en un país donde es tradicional que las familias celebren la última noche del año lanzando fuegos artificiales y todo tipo de petardos, convirtiendo las calles en algunos sitios como en Berlín o Leipzig en una auténtica batalla campal.  Sólo en Berlín se atendió hasta las siete de la mañana a 21 heridos, informó el hospital especializado en accidentes de Berlín (UKB). El equipo de cirugía de manos trabajó en tres salas de operaciones. Al menos cinco pacientes sufrieron graves amputaciones.

En cuanto a las revueltas, en Leipzig un grupo de personas atacó con petardos y piedras a los policías. Los agentes los advirtieron a través de un megáfono, informó la Policía hoy por la mañana. Como continuaron con sus ataques, la Policía empleó camiones lanzaagua. Varias personas fueron detenidas por los graves disturbios. Hasta medianoche cerca de mil personas se congregaron en uno de los barrios más conflictivos de Leipzig, donde después ardieron cubos de basura y otros objetos diversos, lo que obligó a la Policía a lanzar agua para sofocarlos, indicaron las autoridades. En ese momento entre 40 y 50 personas lanzaron botellas, piedras y petardos contra los vehículos y los policías, agregaron. (dpa)