Los responsables del deporte alemán quedaron en el punto de mira por el caso de la remera que se retiró de los Juegos Olímpicos de Londres después de que trascendiera que su novio es un militante neonazi.

"Escándalo nazi en los Juegos Olímpicos", titula el diario de masas "Bild", y dedica una página entera a la remera Nadja Drygalla y su novio, el estudiante universitario Martin Fischer, candidato el año pasado a un Parlamento regional por el ultraderechista Partido Nacional Democrático (NPD).

La comisión de deportes del Parlamento alemán debatirá el asunto en su reunión de finales de septiembre, anunció la jefa de la comisión, Dagmar Freitag.

Sin embargo, informes de prensa indican que los responsables deportivos, por lo menos a nivel local y regional, estaban al tanto de la ideología del compañero sentimental de Drygalla ya antes de los Juegos Olímpicos.

"Estoy muy sorprendida de que las federaciones competentes, en este caso el Comité Olímpico Alemán (DOSB) y la Federación Alemana de Remo (DRV) no supieran nada", dijo Freitag.

Drygalla, natural de Rostock, en el este del país, y de 23 años, abandonó el cuerpo de policía local el año pasado poco antes de ser nombrada funcionaria por su relación con el neonazi, confirmó el ministerio del Interior de Mecklemburgo-Antepomerania.

Fischer integra además la llamada "Camaradería Nacionalsocialista Rostock", un grupo que es observado por los servicios de inteligencia. dpa