Alemania: tres detenidos por al menos mil abusos a menores
30 de enero de 2019
Publicidad
La Policía alemana informó este miércoles (30.01.2019) de la detención de tres hombres por al menos mil agresiones sexuales contra menores, 23 de ellos identificados hasta ahora, y cometidas durante un período de diez años. Las víctimas tienen edades comprendidas entre los 4 y los 13 años, precisó en una rueda de prensa Gunnar Weiss, responsable del grupo encargado del caso, llamado "Camping", ya que fue en un recinto de acampada en la localidad de Lügde, en el estado federado de Renania del Norte-Westfalia, donde tuvieron lugar los abusos. La Policía llevó a cabo cinco registros y se incautó de ordenadores, teléfonos móviles y soportes de datos con un volumen de información de 14 terabites.
Señaló que, por el momento, tienen detectados 13.000 archivos de contenido pornográfico con menores y que en los computadores de cada uno de los detenidos había material de este tipo en el que también aparecen los 23 menores identificados hasta el momento. "Todavía nos queda más por analizar", advirtió Weiss, y agregó que en ese sentido la Policía todavía está "al principio de la investigación". El principal acusado es un hombre de 56 años, detenido el pasado 6 de diciembre, que tenía en acogida a una menor de siete años.
Los indicios recibidos en 2018 sobre una posible agresión sexual contra una niña de seis años, amiga de la menor en acogida, llevaron a la Policía sobre la pista del detenido. A raíz de la investigación, la Policía pudo determinar un abuso ya en 2008 contra una niña de 8 años, así como una cifra mayor de víctimas y amplio material de pornografía infantil, en parte realizado por el propio acusado. Las otras dos detenciones, de un hombre de 48 años y otro de 33, se llevaron a cabo el 10 y el 11 de enero, respectivamente. El hombre de 33 años está acusado de haber actuado junto al principal sospechoso, del que es amigo. El otro detenido está acusado de haber adquirido una parte importante del material pornográfico de manos del principal sospechoso.(dpa/efe)
Deutsche Welle es la emisora internacional de Alemania y produce periodismo independiente en 30 idiomas. Síganos enFacebook | Twitter | YouTube |
Niños rohinyá: abusados, secuestrados, huérfanos
La grave situación de los musulmanes rohinyá, obligados a escapar de las atrocidades cometidas por militantes y el Ejército en Myanmar, es difícil de digerir. Los niños son los más vulnerables, como muestran estas fotos.
Imagen: DW/J. Owens
Disparados y apuñalados
Desde agosto, más de 600.000 rohinyás han huido de Myanmar a Bangladesh. “El día que los militares vinieron, quemaron la aldea y le dispararon a mi madre cuando intentaba escapar. Mi papá no podía caminar, entonces lo apuñalaron. Lo vi con mis propios ojos”, dice Mohammed Belal, de 10 años, quien logró escapar.
Imagen: DW/J. Owens
Perseguidos por el trauma
La hermana de Mohammed, Nur, también vio la matanza. Ella y su hermano viven ahora en un refugio para niños sin compañía en Bangladesh. Ella puede jugar ahí y comer regularmente, un fuerte contraste con su viaje desde Myanmar, donde ella y su hermano casi se mueren de hambre. Pero la niña sigue siendo perseguida por el trauma de las últimas semanas. “Extraño a mis padres, mi hogar, mi país”, dice.
Imagen: DW/J. Owens
Conflicto de profundas raíces
El conflicto, el cual ha tenido lugar en los últimos 70 años y tiene sus raíces en la organización social del país después de la Segunda Guerra Mundial, ha cobrado más de 2.000 víctimas desde 2016, incluyendo la madre de Rahman, de 12 años (arriba). "Incendiaron mi casa y mi madre estaba enferma, así que no pudo irse", dice.
Imagen: DW/J. Owens
Salven a los niños
Dilu-Aara, de 5 años, llegó al refugio con su hermana después de ver a los militares asesinar a sus padres. “Estaba llorando todo el tiempo y las balas volaban sobre nuestras cabezas. De alguna forma escapé”. La agencia internacional Save the Children está ayudando a los menores que llegan a Kutupalong sin sus padres. Los niños representan hasta el 60% de los refugiados rohinyás en Bangladesh.
Imagen: DW/J. Owens
Cazados como animales
Jaded Alam está entre los cientos de niños que llegan a Kutupalong sin sus padres. Afortunadamente, su tía cuida de él, y muy bien, reconoce Jaded, quien creció en una aldea llamada Mandi Para, donde le encantaba jugar fútbol. Todo cambió cuando los militares atacaron. “Nos dijeron que nos fuéramos de nuestra casa. Cuando estaba corriendo con mis padres, les dispararon. Murieron en el acto”, dice.
Imagen: DW/J. Owens
Secuestro de niños
No todos han sido separados durante el escape. Rahman Ali ha estado registrando el refugio por semanas después de que Zifad, su hijo de 10 años, desapareciera. Los rumores sobre el secuestro de niños ha rondado el refugio por años y Rahman teme que su hijo haya caído presa de los traficantes de personas. “No puedo comer, no puedo dormir. ¡Estoy tan enojado! Es como si me hubiese vuelto loco”.
Imagen: DW/J. Owens
"Mi mente no es normal"
Cuando comenzó el tiroteo, Sokina Khatun hizo todo lo que pudo para proteger a sus hijos, pero no pudo salvar a Yasmine, de 15 años, y Jamalita, de 20, quienes estaban en una aldea vecina en el momento. “Les cortaron la garganta en frente de sus abuelos”, dice. “Estaba paralizada, no podía sentir el dolor. Ahora mismo, mi mente no es normal”, dice. Ella logró rescatar a nueve de sus niños.
Imagen: DW/J. Owens
Atacados, violados y robados
Yasmine cree que podría tener 15 años, pero luce considerablemente más joven. En su aldea, solía jugar con canicas y correr por los campos vecinos, pero recuerdos diferentes la persiguen ahora: el ataque de las fuerzas de Myanmar, la golpiza y asesinato de sus amados padre y hermanos y la violación por parte de un grupo de soldados que también la robaron: “Sentí mucho dolor en mi cuerpo”, dice.