El interés mutuo por mejorar las relaciones parece ser genuino. Aunque Schröder y Aznar no se puedan oler, saben superar su incompatibilidad de caracteres para dedicarse a lo que fueron elegidos: gobernar en bien de sus países... y de Europa. Ésta fue la impresión que dieron durante la XVIII Cumbre germano-hispana, celebrada en la sede de la Cancillería en Berlín, con la participación de los ministros de Asuntos Exteriores, Defensa, Interior, Justicia, Ciencia y Tecnología y Fomento de los dos países. En un marco de general coincidencia en la mayor parte de las cuestiones abordadas en esta cumbre, Schröder reconoció que existen diferencias, sobre todo, en un punto: el voto del Consejo, porque Alemania apoya la propuesta de la Convención, que atiende al criterio de población y, por tanto, restaría poder a España, que prefiere el mantenimiento del consenso del Tratado de Niza. "Creemos que es legítimo ver la igualdad de los países en la ponderación de los votos, pero también que haya efecto en la diferencia de población", dijo Schröder, quien pronosticó que no se resolverá antes de la sesión final de la Cumbre de Bruselas de diciembre, donde consideró posible que haya "una larga noche".

Aunque España y Alemania tienen "divergencias institucionales" inocultables, como lo reconociera Aznar, ambos países están en un proceso de comprensión mutua porque ambos quieren llegar a una conclusión antes de final de año. "Hace falta hacer un esfuerzo por comprender las posiciones de los demás para intentar llegar a soluciones útiles para todos", explicó el presidente del Gobierno español.

El aporte español

España está asumiendo mayores compromisos en sus capacidades de Defensa y coopera con Alemania en el programa de helicópteros de ataque "Tigre", así como el caza "Eurofighter", el tanque de combate "Leopard" y otros para el futuro. En este contexto, el español insistió en que no se trata de "duplicar" esfuerzos con la OTAN, mientras Schröder negó que haya una "iniciativa franco-alemana" en este aspecto sino "una iniciativa de Bruselas llevada a cabo por Francia, Alemania, Bélgica y Luxemburgo", con la aspiración de una identidad europea de defensa dentro de la OTAN.

En el marco internacional, Aznar reiteró el compromiso español con la reconstrucción de Irak, asunto que dijo está directamente relacionado con la posibilidad de avanzar en la aplicación de la Hoja de Ruta para la paz en Oriente Medio. Tampoco hubo discrepancias en torno al Pacto de Estabilidad y Crecimiento, ante la supervisión del incumplimiento francés y las dificultades alemanas. Aduciendo al tema, Schröder explicó que no se trata de poner en tela de juicio el pacto de estabilidad, sino de "tomarlo como base para una interpretación flexible que haga posible combinar los impulsos de crecimiento con los elementos de estabilidad", que son necesarios en Alemania en este momento. El canciller aseguró además, que es "importante lograr crecimiento sin dejar de lado la estabilidad" y destacó que tampoco Francia pone en discusión el pacto de estabilidad.

Pero además de acuerdos también hubo cumplidos expresos en Berlín. El jefe del Ejecutivo español elogió el esfuerzo de reformas iniciado por el Gobierno alemán, que da "indicios" de que habrá recuperación, y destacó la importancia para Europa que tiene la recuperación de la economía alemana, que es el 30% de la europea. Aznar también agradeció a Schröder su "hospitalidad" y la "calidez" de su acogida, destacó los acuerdos en materia de Defensa, de proyectos industriales, en Justicia, transportes, ciencia, tecnología y cultura alcanzados en una cumbre que ha demostrado que "tenemos un marco (de relaciones) muy completo".

Etarra será extraditado a España

Aznar aprovechó la ocasión para subrayar la importancia de que el Tribunal Constitucional alemán haya rechazado el recurso presentado por el presunto etarra Pablo Elkoro, detenido en Alemania, y que pretendía evitar su extradición a España. Elkoro fue detenido en Núremberg el pasado mes de enero acusado de intervenir en un atentado contra un cuartel militar de Alava y de enviar cartas amenazadoras a embajadas y al sector turístico. Aznar dijo que la decisión del Tribunal Constitucional "denota un conocimiento muy estricto de las responsabilidades y las actuaciones desde el punto de vista judicial y de respeto al Estado de Derecho en Alemania y en España". La extradición se podría llevar a cabo en los próximos días.

Los ministros de Interior de España y Alemania, Angel Acebes, y Otto Schily, respectivamente, firmaron además, acuerdos bilaterales que incluyen equipos conjuntos de investigación policial contra el tráfico de "blancas", acceso a bases de datos de huellas dactilares, intercambio de oficiales aeroportuarios para vigilar determinadas rutas con tránsito en uno de los dos países y destino final en el otro, cuando se sospeche que se desplazan integrantes de grupos terroristas o de delincuencia organizada o se utilicen como vía de inmigración ilegal, introducción progresiva de datos biométricos en visados, permisos de residencia y pasaportes. Aunque la amistad de Schröder y Aznar no haga historia, lo que sí puede pedirse es que sea efectiva y éste es un buen comienzo.