El independiente Kai Buchmann obtuvo el 54,9 por ciento de los votos frente al 45,1 por ciento del candidato de la ultraderecha, Jörg Prophet, que se había impuesto en la primera vuelta.

En la primera vuelta Prophet obtuvo un 42,1 por ciento frente al 23,7 por ciento de Buchmann contra quien, además, había un proceso disciplinario pendiente y llegó a estar suspendido de su cargo.

Tras la primera vuelta diversos partidos y organizaciones llamaron a evitar el triunfo de la AfD. "Por favor, voten por la democracia, ni un voto por la AfD. Den su voto a Kai Buchmann", apeló el jefe del Partido Socialdemócrata en Turingia, estado federado donde se encuentra Nordhausen, Georg Maier.

Los Verdes en Nordhausen llamaron explícitamente a votar por Buchmann y pidieron una "segunda oportunidad" para él pese a todas las críticas de que había sido objeto.

La Unión Cristianodemócrata (CDU) y el Partido Liberal (FDP) fueron más reservados y se limitaron a pedir a la gente que fuera a las urnas sin hacer una recomendación explicita pero sabiendo que la abstención podía favorecer a la AfD.

Un comunicado de la CDU expresaba su confianza en que "los electores son lo suficientemente maduros".

Nordhausen es una ciudad de 42.000 habitantes y en sus alrededores está situado el antiguo campo de concentración de Mittelbau-Dora donde al menos 60.000 personas estuvieron prisioneras durante el régimen nazi y 20.000 murieron.

La ciudad pertenece al estado federado de Turingia donde la AfD es liderada por Björns Höcke, la cabeza visible del ala más radical del partido.

El propio Prophet ha sido acusado por diversas organizaciones de revisionismo histórico y la AfD en Turingia es calificada por la Oficina para la Protección de la Constitución como claramente de ultraderecha. 

rml (efe, tageschau)