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Países latinoamericanos más peligrosos para periodistas

Eva Usi
27 de diciembre de 2016

Una lista de los países latinoamericanos más mortíferos para los representantes de medios de comunicación en 2016.

Imagen: Getty Images/AFP/L. Robayo

México: Los cárteles, en particular el de Los Zetas, imponen el terror en estados del noreste y del Golfo de México, según la organización Reporteros sin Fronteras (RsF). Eliminan a periodistas para impedir que interfieran en los secuestros y actos de barbarie que cometen. La organización denuncia que las autoridades policiales y judiciales, extremadamente corruptas, cierran los ojos, y que los elementos de la Policía son los principales agresores de periodistas en el país. Entre los asesinatos ocurridos este año figura el de Pedro Tamayo Rosas, que fue asesinado en Veracruz después de haber recibido amenazas de muerte. Anabel Flores Salazar, que también trabajaba en Veracruz, fue hallada muerta en Puebla con los pies y las manos atadas.

Guatemala:  Nueve comunicadores fueron asesinados en 2016 en el país centroamericano, según el informe del Centro de Reportes Informativos sobre Guatemala (Cerigua), organismo que exigió al Ministerio Público investigaciones exhaustivas para esclarecer estos crímenes. Hasta la fecha sólo se ha producido una sentencia judicial desde el 2000.

El Salvador: Dos periodistas fueron asesinados este año, según la organización Campaña Emblema de Prensa (PEC, según sus siglas en inglés). El peligro en el país centroamericano viene de parte de las maras y de distintos cárteles de narcotraficantes que se reparten el país.

Panamá: El periodista holandés Okke Ornstein fue liberado el jueves 22 de diciembre, encarcelado por supuestas injurias y calumnias. El periodista fue detenido el pasado 15 de noviembre por haber publicado varios artículos en su página web en los que denunciaba supuestos negocios turbios realizados en Panamá. Ornstein vive en Panamá desde hace 15 años y se hizo enemigos al denunciar las actividades fraudulentas y de lavado de dinero por parte de empresarios franceses.

Perú: El periodista radial Hernán David Choquepata Ordoñez fue asesinado el 20 de noviembre pasado por desconocidos que le propinaron una paliza antes de dispararle. Los asesinos destruyeron el equipo de la emisora ubicada en el departamento de Arequipa. La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó el crimen y pidió a las autoridades llevar a los asesinos ante la Justicia.

Venezuela: El caso de la periodista venezolana Melissa Turibbi, cuya vivienda fue allanada por agentes de la Policía venezolana que causaron destrozos, muestra el acoso constante contra periodistas que son críticos al gobierno de Nicolás Maduro. Otro caso que ilustra las agresiones de las que son víctimas las voces críticas al régimen es el del periodista Braulio Jatar, detenido en septiembre por haber publicado protestas contra Maduro, es uno de los últimos prisioneros políticos del chavismo dentro de un grupo que se cifra en 108 personas desde la llegada al poder de Nicolás Maduro. Este año fue asesinado un informador y la situación en el país preocupa particularmente a la Sociedad Interamericana de Prensa.

Cuba: El país sigue sufriendo una falta de libertades, según Reporteros sin Fronteras, que afirma que la represión de las voces disidentes sigue siendo la marca del castrismo. El país caribeño es el peor calificado por la organización, con sede en París, y ocupa el puesto 171 en un ranking de 180 países. Las agencias de prensa, los medios independientes y bloqueros que se oponen al monopolio de la información por parte de la prensa oficial son víctimas de intimidaciones, detenciones arbitrarias y una censura feroz. RsF afirma que en Cuba sigue habiendo dos periodistas encarcelados.

Claves - América Latina: La prensa y la corrupción

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