En 2011, en medio de la crisis del euro, la revista satírica española "El Jueves" retrató a la canciller como una dura dominatriz, mientras el entonces jefe de gobierno de España, Mariano Rajoy, se sometía. Con la caricatura, la revista quiso mostrar que las condiciones de Merkel para otorgar a España ayuda financiera eran claramente demasiado estrictas.

Además de España, Grecia también se vio sumergida en una profunda crisis del euro. Sin ayuda financiera, el país habría tenido muchos problemas. Angela Merkel prometió ayudar, pero exigiendo a cambio estrictas medidas de austeridad. La prensa griega, como el diario "Demokratie" (9 de febrero de 2012), vio paralelismos con la ocupación alemana en la Segunda Guerra Mundial.

Las referencias al régimen nazi aterrizaron no solo en las portadas griegas sino también en las polacas. El semanario conservador "Uwazam Rze" retrató a Merkel en 2013 como reclusa en un campo de concentración. Se trató en realidad de una crítica a la serie de la cadena pública alemana ZDF, "Nuestras madres, nuestros padres", por falsificar, según la revista, la historia de la guerra.

Esta portada es mucho más sobria: Merkel con una mirada penetrante. "Pokerface" es el título de esta revista china de diciembre de 2011, lo que sugiere un cierto respeto por la canciller. Esta revista apareció poco antes de la visita de Estado de Merkel a China, durante la cual habló con el entonces primer ministro, Wen Jiabao, sobre el papel de China en la estabilización de la eurozona.

La revista política británica "New Statesman" retrató a la canciller como una peligrosa máquina asesina "Terminator", en junio de 2012. Un papel interpretado por el mundialmente conocido Arnold Schwarzenegger. Según la revista, Merkel era la líder política alemana más peligrosa desde Adolf Hitler, e incluso más peligrosa que gobernantes como Kim Jong Un.

En 2015, la imagen de Angela Merkel cambió de repente. Después de que Hungría se negara a aceptar refugiados que escapaban de la guerra civil siria, Merkel tomó una decisión crucial: permitió que entraran a Alemania. Su frase "¡Podemos hacerlo!" pasó a la historia y ella se volvió muy popular, sobre todo, en el extranjero.

La mala imagen de Angela Merkel por la crisis del euro pasó a ser cosa del pasado. Se convirtió en una persona célebre en el extranjero por su humanidad, lo que la distinguió de otros políticos. La revista francesa "Le Point" tituló en 2015: "La increíble madame Merkel. Si tan solo fuera francesa ...", dando fe de su transformación de "estricta" a "generosa".

Ese mismo año, la revista "Time" nombró a Angela Merkel "Persona del año" y la elogió como "canciller del mundo libre". Ella usa su misericordia como arma,apuntó la revista. Con su pintura de portada, el artista norirlandés Colin Davidson quiso expresar "un poco de la dignidad, la compasión y la humanidad de la canciller".

En Polonia, la compasión y la humanidad no son virtudes atribuidas a Angela Merkel. La revista semanal "Wprost" tituló: "Quieren controlar Polonia nuevamente". Y una vez más publicó una comparación con Hitler. En ella, se puede ver la imagen de la canciller, rodeada de importantes representantes de la UE, como el presidente de la Comisión, Junker, en una alusión a una foto histórica de Hitler.

La CDU de Angela Merkel sufrió grandes pérdidas en las elecciones generales de 2017. Con su postura sobre la crisis de los refugiados, el partido perdió muchos votos frente al partido de ultraderecha AfD. Se debatía entonces la posibilidad de una coalición llamada "Jamaica" por los colores de la bandera de ese país, que coinciden con los de los partidos CDU/CSU, FDP y Los Verdes.

Angela Merkel pasó sus últimos años en un gobierno en coalición: CDU/CSU y SPD. Después de 16 años, se jubila voluntariamente. En los medios de comunicación y en libros se habla del final de una "época", como en la biografía de Merkel, de Ursula Weidenfeld (en la imagen). Lo que venga después de Angela Merkel, se decidirá en las elecciones generales del 26 de septiembre.