Los socialdemócratas, que gobernaron Hamburgo durante 44 años hasta 2001, cuando se hizo con el gobierno el carismático democristiano Ole von Beust, rondan el 50 por ciento y avanzaron casi 15 puntos (2008: 34,1%) para conseguir el mejor resultado en elecciones regionales desde 1994.

Von Beust dejó el poder en manos del ministro del Interior, Christoph Ahlhaus, un tecnócrata que no consiguió conectar con la población durante su corta gestión y fue castigado ahora en las urnas.

"Creo que es un resultado histórico. No solamente para nosotros, sino para los demás", dijo dirigiéndose a los socialdemócratas el presidente de la socialdemocracia, Sigmar Gabriel.

Los absolutos perdedores

La Unión Demócrata Cristiana (CDU), de la canciller alemana, Angela Merkel, sufrió este 20 de febrero una dramática derrota en las elecciones regionales de Hamburgo, las primeras de una serie de siete que se celebrarán este año.

La CDU, que gobernaba desde hace casi diez años esta ciudad-estado en el norte del país, alcanzó alrededor 20 por ciento de los votos, según las primeras encuestas a boca de urna. El partido de Merkel fue desbancado por el Partido Socialdemócrata (SPD), que recupera su feudo histórico y que podría gobernar con toda probabilidad en solitario.

De confirmarse las cifras, la CDU de Merkel ha perdido más de la mitad del 42,8 por ciento de los comicios pasados y obtendría el peor resultado de posguerra en Hamburgo. "Esta hora es aciaga para la CDU y nos desconcierta", reconoció el candidato derrotado, el hasta ahora alcalde-gobernador Christoph Ahlhaus.

Verdes apostaron mucho y perdieron

Alrededor del 11 por ciento y menos de lo esperado obtuvo el Partido de los Verdes, que se alió en la última legislatura a la CDU y abandonó el poder forzando la celebración de elecciones anticipadas.

El resultado supera el 9,6 por ciento de 2008, pero todo parece indicar que deberá enterrar las ilusiones de formar dupla gobernante con los socialdemócratas.

Los Verdes dejaron la primera alianza con la CDU en Alemania en noviembre pasado, poco meses después de que renunciara el popular Ole von Beust y dejaran sus cargos varios ministros conservadores.

Liberales, débiles, pero no tanto como se creía

El Partido Liberal (FDP), socio menor de la coalición de Merkel en Berlín, obtuvo un 6,5 por ciento de los votos y retorna al Parlamento hamburgués tras años de ausencia. De esta manera, los liberales estarán representados en los 16 hemiciclos regionales de Alemania.

También consiguió nuevamente representación parlamentaria el Partido de La Izquierda, con el 6,5 por ciento. Cerca de 1,3 millones de electores fueron llamados a renovar la Cámara Legislativa regional. Los pronósticos en base a las encuestas a boca de urna son esta vez menos fiables que lo normal debido a un nuevo sistema de votación que podría modificar las cifras, si bien no la tendencia.

“Derrota democristiana estaba cantada”

Según los analistas, el revés para los democristianos estaba cantado y obedece a razones puramente regionales y no de política nacional. En una encuesta del Instituto Forschungsgruppe Wahlen, 82 por ciento de los votantes dijeron que la política local había sido determinante para su comportamiento.

La derrota en Hamburgo supone otro revés para la gestión de la canciller, cuya centroderecha perdió el año pasado la mayoría en la Cámara Alta (Bundesrat) del Parlamento y se enfrentará a una oposición fortalecida.

Las elecciones de Hamburgo marcan el comienzo de una maratón de siete comicios regionales. Le seguirán dos importantes citas con el electorado, en Sajonia-Anhalt, el 20 de marzo y Baden-Württemberg, el 27 de ese mes. Estos dos estados federados tienen jefe de gobierno conservador y en ambos, la situación es espinosa para los democristianos de Merkel.

También se renovarán los parlamentos regionales Renania-Palatinado (27 de marzo) de Bremen (22 de mayo), Mecklemburgo-Pomerania Occidental (4 de septiembre) y Berlín (18 de septiembre).

2011 promete ser un año lleno de emociones. Hoy se dio la primera sorpresa y el año apenas comenzó.

Autor: JOV/dpa/Reuters

Editora: Claudia Herrera Pahl