¡Lo hemos patentado! Decía Steve Jobs al presentar al mundo orgulloso su primer iPhone, al tiempo que la competencia se burlaba. “¿Un teléfono por 500 dólares? Será el teléfono más caro del mundo. ¿Ni siquiera con un teclado?“, comentaba el gerente de Microsoft, Steve Ballmer.

En ese momento, probablemente sólo los círculos de Apple valoraban el alcance de la visión de Jobs. Aun así, es posible que ni siquiera fuesen conscientes de la revolución que iban a provocar en la comunicación.

Patentes y tribunales

Ahora, media década después, dicha visión continúa de máxima actualidad como clave de acceso para el mercado de los teléfonos móviles. Poco después de que un jurado de California considerase probada la culpabilidad de Samsung en el robo de patentes, la empresa se vio obligada a pagar más de 1000 millones en multas. Si bien es una cantidad “pagable” para el gigante coreano, representa un gran golpe a su imagen como marca innovadora.

Tim Cook, sucesor de Jobs, se había declarado contrario a la guerra de patentes. Sin embargo, también estaba por la labor de combatir las continuas copias de los desarrollos “Made in Apple”. Y con éxito. Además de la multa, actualmente la marca de la manzana trata de impedir la comercialización de 8 modelos de teléfono de Samsung. Una gran jugada de cara a los cientos de millones de futuros clientes en la competición de los smartphones que apenas acaba de comenzar.

La última oportunidad

Ahora, tras haber conseguido una aplazamiento en la sentencia hasta diciembre y aprovechando la mayor muestra de consumibles electrónicos de Europa, Samsung presentará en la IFA de Berlín la segunda generación del Samsung Note, el segundo más popular de la casa después del Galaxy S. Excluido de la lista de “ventas prohibidas”, los coreanos tendrán la oportunidad de iluminar la penumbra que se cierne sobre su fama.

“No habrá grandes cambios e innovaciones en diseño, pero el Note 2 tendrá mejoras y permitirá a Samsung impulsar las ventas en la categoría, comentaba el analista Lee Sun –Tae a la agencia Reuters: “Con el lanzamiento, Samsung también tratará de revertir el ánimo pesimista tras la derrota en los tribunales de Estados Unidos“.

Pero… ¿Será suficiente una enorme pantalla de 5,5 pulgadas y un potente procesador quad-core para vencer al gigante Apple? ¿Podrá Android mantenerse ante el nuevo iPhone?

En cualquier caso, será una ocasión para Samsung de desmarcarse de la creciente competencia en el mercado de los smartphones de pantalla táctil. Sobre todo para asegurar posiciones antes de presentar, según los rumores, pantallas flexibles a finales de año. Por cierto, otra vez más un poco más tarde que Apple, que a partir de septiembre sacará su nuevo iPhone.

Autor: José A. Gayarre

Editora: Cristina Papaleo