Apple y Google: usuarios controlarán herramienta de rastreo
25 de abril de 2020
Los dos gigantes se asociaron de forman inédita: los teléfonos con iOS y Android intercambiarán información para que los usuarios sepan si se cruzaron con una persona diagnosticada como portadora del coronavirus.
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Las estadounidenses Apple y Google, dos de las mayores empresas tecnológicas del mundo, afirmaron este viernes (24.04.2020) que los usuarios de la tecnología que están desarrollando juntos, que servirá para localizar a los contactos de los enfermos de COVID-19, podrán controlar sus datos.
También aseguraron que el sistema se desactivará probablemente cuando termine la pandemia.
Los dos gigantes de Silicon Valley presentaron hace dos semanas una asociación inédita que permitirá a los teléfonos equipados con el sistema operativo iOS de Apple y el Android de Google intercambiar información a través de la tecnología bluetooth para que los usuarios sepan si se cruzaron con una persona diagnosticada como portadora del coronavirus.
Esta tecnología ha suscitado preocupación sobre el respeto de la vida privada de los usuarios, por lo que Apple y Google mostraron este viernes algunos detalles técnicos relacionados con la confidencialidad de los datos.
"Cada usuario deberá elegir explícitamente si activa la tecnología. También puede ser desactivada en cualquier momento por el usuario", escribieron las dos empresas en un comunicado conjunto.
"Este sistema no recoge información sobre la localización de su aparato y no comparte su identidad con los demás usuarios, ya sean de Google o Apple", añadieron. "El usuario controla todos los datos que desea compartir y la decisión de compartirlos o no".
La tecnología desarrollada por Google y Apple, que tienen los sistemas de explotación de celulares más utilizados en todo el mundo, se estrenará a principios de mayo.
Google y Apple sugirieron además que la aplicación podría dejar de funcionar cuando pase la pandemia, al asegurar que el sistema se podrá "desactivar" según las regiones cuando deje de ser útil.
rrr (afp/efe)
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Películas realizadas en un espacio reducido
¿Qué pasa cuando el espacio queda reducido a nuestras cuatro paredes? En tiempos de coronavirus, muchos fanáticos de cine se están haciendo esa pregunta. El cine ya ha dado ejemplos. Aquí algunos.
Imagen: picture-alliance/United Archives/IFTN
Alfred Hitchcock: "La ventana indiscreta" (1954)
El fotógrafo Jeff (James Stewart) no puede salir de su departamento, una pierna enyesada lo ata a una silla de ruedas. Solo su novia Lisa (Grace Kelly) lo puede visitar, pero, ¿qué hacer aparte de mirar por la ventana? Este clásico de Hitchcock es, probablemente, la película más famosa que limita a sus protagonistas a sus cuatro paredes - y sigue siendo tremendamente emocionante.
Imagen: picture-alliance/United Archives/IFTN
Luis Buñuel: "El ángel exterminador" (1962)
Misteriosa es la película que el español Luis Buñuel hizo a principios de los 60 del siglo pasado en su país adoptivo, México. "El ángel exterminador" muestra a invitados de una fiesta burguesa que quedan encerrados en las instalaciones de una villa. La razón no se explica en la trama. Y eso es lo pérfido del clásico de Buñuel: desafía al público. Filosóficamente, una obra maestra.
Imagen: picture-alliance/United Archives/IFTN
Roman Polanski: "Repulsión“ (1965)
Además de Hitchcock y Buñuel, Polanski es el tercer director de fama mundial que reduce radicalmente los escenarios de sus protagonistas. Tres años después de "El ángel exterminador" de Buñuel, llegó a los cines "Repulsión": el espantoso caso de la joven Carol (Catherine Deneuve) que no quiere salir de su departamento y siente gran repulsión sexual. Polanski tampoco aclara del todo las razones.
Imagen: imago/United Archives
Sidney Lumet: "Doce hombres sin piedad" (1957)
El director Sidney Lumet, por otra parte, presenta una narrativa compacta en su primer largometraje: un joven puertorriqueño es acusado de asesinar a su padre y un tribunal debe emitir un veredicto. Los doce miembros del tribunal se retiran hacia una habitación, de la que después no pueden salir. Lumet convierte esto en una pequeña obra maestra que une a los protagonistas de manera efectiva.
Imagen: picture-alliance/United Archives
Tevfik Başer: "40 m² Alemania" (1985)
Esta película es menos conocida internacionalmente. Pero el director alemán de origen turco, Tevfik Başer, tuvo un brillante éxito con su ópera prima. La historia trata sobre un emigrante turco y su esposa en Hamburgo: su departamento se convierte en una prisión para ellos. Una película que no ha perdido nada de su actualidad.
Imagen: picture-alliance/United Archives
Duncan Jones: "Moon" (2009)
Claustrofobia, aislamiento, distancia: esto también puede suceder en otro lugar que no sean las propias cuatro paredes. El cine de ciencia ficción tiene muchos ejemplos. Uno de los más efectivos es "Moon", el debut del hijo de David Bowie, Duncan Jones. Un técnico estuvo viviendo solo en una estación lunar durante tres años: una película increíblemente inquietante sobre el confinamiento espacial.
Imagen: Koch Media
Wolfgang Fischer: "Styx" (2018)
Al igual que en el espacio, puede ser muy solitario estar en alta mar, a miles de kilómetros de un puerto. El cine ha contado a menudo esta historia con éxito: la inmensidad como espacio estrecho. El Atlántico se convierte en un infierno en "Styx", que muestra a Rike (Susanne Wolff) en un fallido viaje de vacaciones. Su mundo queda reducido a los pocos metros cuadrados de un velero. Aterrador.
Imagen: trigon-film.org
Robert Zemeckis: "Cast Away" (2000)
En esta película de Hollywood, también el mar es protagonista - y el héroe queda aislado del mundo. Películas en islas, todas basadas en la novela clásica "Robinson Crusoe", de Daniel Defoe, publicada hace 300 años, muestran a personas abandonadas a su suerte. La exitosa película de Tom Hanks, "Cast Away", fue una nueva versión de "Robinson Crusoe".
Imagen: Imago/Prod.DB
Joel Schumacher: "¡No cuelgues!" (2002)
El director Joel Schumacher redujo de forma consecuente el espacio a las dimensiones de una cabina telefónica. La trama del thriller se centra en su protagonista (Colin Farell), que prácticamente no sale de la cabina durante toda la película al quedar amenazado por un asesino. Así también puede funcionar un nuevo cine de entretenimiento inteligente. Este fue casi un experimento cinematográfico.
Imagen: picture-alliance/United Archives
Chris Columbus: "Mi pobre angelito" (1990)
Finalmente, este clásico de películas con locaciones limitadas. "Mi pobre angelito" fue un éxito mundial en 1990: Kevin (Macaulay Culkin), de ocho años, es olvidado por su familia en su casa. Kevin conquista ésta de una manera completamente novedosa: un lugar donde puedes hacer de todo. Pero para su mala suerte, llegan dos ladrones. A pesar de todo, la película es muy divertida. (ct/vt)