Parecía que la selección australiana tenía ganas de pelear al principio del torneo cuando, aún perdiendo el partido, pusieron en aprietos a la selección alemana. Sin embargo, en el Frankenstadion de Leipzig no mostraron la agresividad que los espectadores esperaban.

Los australianos salieron con ganas al campo intentando hacerse con el control del juego. Tras los primeros 10 minutos, la escuadra argentina hizo acto de aparición dominando el resto de la primera mitad y consiguiendo llegar a la pausa con un marcador favorable por dos goles de diferencia.

Luciano Figueroa fue el encargado de marcar el primer tanto para los ganadores. El jugador logró el gol al recibir un pase tras jugar con sus compañeros al borde del área, desde donde disparó con fuerza y batió al guardameta Schwarzer. Australia no consiguió reaccionar y rápidamente llegó el segundo tanto tras un penalti que Riquelme se encargó de anotar.

La falta de ambición y picardía para llegar a la puerta contraria marcó todo el partido mientras Argentina manejaba la pelota a su antojo por todo el campo. La fórmula argentina se basó en la paciencia, haciendo rodar el balón sin precipitarse y sólo entrando al área contraria en situaciones claras y prometedoras.

Tras la pausa, Australia salió con más fuerza pero sus esperanzas cayeron pronto en saco roto. Ocho minutos de juego bastaron a los argentinos para acabar de rematar a Australia con el segundo tanto de Figueroa. Con tres goles en contra, lo único que les quedaba a los hombres de Farina era intentar salvar la honra.

Entonces llegó el balón de oxígeno. Aloisi cayó en el área tras una falta de Coloccini y consiguió transformar el penalti. Había que remontar dos goles en 35 minutos. Tras unos minutos y un gran fallo defensivo de los rivales, llegó el segundo gol del once australiano conseguido por Aloisi, y con el la presión sobre la escuadra albiceleste.

Australia continuó jugando con la misma tónica pero en ningún momento dio por perdido el partido. Así llegaron casí al final del partido. Cuanto todo parecía ya decidido, Argentina se encargó de reafirmar su superioridad con el tercer gol Figueroa. El duo entre el delantero y su compañero Riquelme fue el arma clave para los albicelestes, que jugaron bien pero sin hacer gala de un fútbol espectacular. Pese a haber perdido, Australia dejó clara su inquebrantable voluntad mostrada ante Alemania y siguió luchando por igualar hasta el final del partido.

Australia: Schwarzer - Muscat, Moore, Vidmar, Neill - Milicevic - Emerton, Skoko, Cahill, Chipperfield - Aloisi.

Entrenador: Farina

Argentina: Lux, Samuel, Coloccini, Heinze, Santana, Bernardi, J. Zanetti, Soria, Riquelme, Saviola, Figueroa.

Entrenador: Pekerman

Goles: 0:1 Figueroa (12., por la izquierda servido por Santana), 0:2 Riquelme (32., penalti), 0:3 Figueroa (53., desde el flanco izquierdo), 1:3 Aloisi (61.,penalti), 2:3 Aloisi (70.), 2:4 Figueroa (a pase de Riquelme)

Cambios: 46.Viduka por Muscat, 57. McKain por Milicevic, 74. Culina por Skoko - 66. Cambiasso por Santana, 73.Aimar por Saviola, 87. Gonzalo Rodríguez por Coloccini

Árbitro: Maidin

Espectadores: 25. 000

Tarjetas Amarillas: Neill, Emerton, Cahill, Moore - Samuel