La vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, aseguró este viernes (06.05.2022) que las diferencias internas con el mandatario argentino, Alberto Fernández, no son una "pelea” ni una "disputa de poder” sino un "debate político” sobre el rumbo económico y los condicionamientos que impone el Fondo Monetario Internacional (FMI).

La vicepresidenta se pronunció luego de haber cuestionado el verdadero poder y la legitimidad de Alberto Fernández, a la par de que el ala kirchnerista de Gobierno haya embestido en los últimos días contra la figura del ministro de Economía, Martín Guzmán, y el acuerdo que Argentina firmó con el FMI en marzo de 2022.

Cristina Fernández indicó este viernes que "lo que está pasando en el Poder Ejecutivo, pelea no es”, sino que se trata de un "debate de ideas”, en un discurso en la provincia del Chaco (noreste), gobernada por un aliado de la expresidenta (2007-2015), donde recibió un doctorado honoris causa de la Universidad Nacional del Chaco Austral.

La tensión al interior del oficialismo es tal que el propio presidente -media hora antes de la ponencia de la vicepresidenta- pidió en un discurso en la provincia austral de Tierra del Fuego: "Por favor, miremos el futuro, que nadie nos desuna, trabajemos juntos. Eso es lo que nos hace falta”.

Alberto Fernández fue nombrado candidato presidencial por Cristina Fernández de Kirchner para integrar la fórmula que ganó las elecciones para gobernar Argentina desde diciembre de 2019, pero hace dos meses que no se hablan. La vicepresidenta descartó tener "una disputa de poder” con Fernández, en tanto consideró "un acto inteligente” haberlo elegido candidato: "Elegí a una persona que hoy es presidente que no representaba ninguna fuerza política”, tras señalar que tendría una disputa de poder si hubiera elegido al líder de un partido, de la central sindical o de un movimiento social.

En tanto, la funcionaria cuestionó la política económica con "una inflación que no se detiene”, superior al 55 % interanual, la caída del poder adquisitivo, y afirmó que "algo o algunos están fallando” si se ha elegido el modelo de producción y exportaciones, bajos salarios y además faltan dólares. Dijo que "la escasez de dólares” es "la verdadera causa de la disparada de precios” y anticipó que todos los partidos políticos argentinos "se van a tropezar” con el esquema de la "economía bimonetaria" argentina, "pero ahora mucho más” por la deuda con el FMI.

"Por estas cosas discutimos, debatimos y nos oponemos a determinadas cosas. Ni por cuestiones de poder, ni por cuestiones de caja ni porque me miró mal o no me invitó a comer”, sostuvo la vicepresidenta y cerró con su "mayor preocupación” y "amargura”: "No le estamos haciendo honor a tanta confianza y tanta esperanza que nos depositaron”.

ama (efe, afp)