Con un claro mensaje de repudio contra la censura en Irán, el Festival de Cine de Berlín presentó al jurado que decidirá sobre los Osos de Oro y de Plata, los mayores galardones del festival que en su edición 61 se disputan 16 películas. Al lado de la presidenta del jurado, la actriz italiana Isabella Rossellini había una silla vacía, que debía haber sido ocupada por el cineasta iraní Jafar Panahi.

Condenado a seis años de cárcel y acusado de conspiración y propaganda antigubernamental por las autoridades de Teherán, al ganador del Oso de Oro en la Berlinale 2006 con su película “Offside” se le prohibió hacer cine, escribir guiones o viajar al extranjero durante veinte años.

“No hemos perdido las esperanzas, su presencia es muy fuerte aunque no se encuentre presente físicamente. La invitación a que participara en el jurado es un símbolo de defensa de la libertad de expresión”, advirtió con voz suave Isabella Rossellini.

La protagonista de la película Blue Velvet recordó que el arte cinematográfico se basa en la libertad de expresión y en la tolerancia y que Panahi ha luchado por no tener que hacer películas de propaganda.

Considerado una de las voces más críticas e influyentes de su país, el realizador iraní se ha interesado por proyectar los problemas sociales y en particular por la situación de las mujeres. Apoyó abiertamente la movilización civil conocida como Movimiento Verde que se opuso a la reelección de Mahmud Ahmadineyad.

El actor indio Aamir Khan, que coincidió con Panahi en el jurado del Festival de Locarno, dijo haber trabajado mucho con él y lo elogió como una persona de una gran dignidad humana y un embajador de su país y su cultura. El 11 de febrero, aniversario de la Revolución Iraní, Panahi será recordado con la proyección de su película Offside en el marco de la Berlinale. También serán exhibidas las películas El Círculo, Crimson Gold (Talaye sorkh), el Balón blanco (Badkonak-e Sefid) y el cortometraje Untying the Knot, en distintas secciones del festival para destacar la versatilidad y amplia obra del artista iraní.

Hija de Ingrid Bergman

El toque de glamour lo aportó Isabella Rossellini que acaparó todas las cámaras. La hija de la actriz sueca Ingrid Bergman y del cineasta italiano Roberto Rossellini, dijo que fue maravilloso tener como padres a íconos del cine como ellos, que eso le permitió crecer en los sets y aprender a amar el cine desde muy joven.

“Fueron personas maravillosas que desgraciadamente murieron cuando tenía 20 años. No pudieron ver mi carrera ni conocer a mis hijos”, lamentó la actriz que debutó al lado de su madre en un pequeño papel en la película A Matter of Time (1976), pero luego se convirtió en una cotizada modelo hasta que Blue Velvet la convirtió en un ícono del cine de la noche a la mañana.

“Ahora Electra y Roberto ya son mayores y mi papel de mamá ha terminado”, dijo Rossellini y añadió que ahora puede permitirse el lujo de pasar diez días disfrutando el placer de ver películas como miembro del jurado. Además de Rossellini y Khan, el jurado está integrado por la actriz alemana Nina Hoss, la productora australiana Jan Chapman, la diseñadora británica Sandy Powell y el cineasta canadiense Guy Maddin (La música más triste del mundo).

Rosellini recordó la serie de cortometrajes que presentó en Berlín hace unos años titulados Green Porno (Porno Verde) en los que explica el misterio de la vida a través de los rituales sexuales de distintas especies del reino animal. En el proyecto se apoyó con asesores como el biólogo marino argentino Claudio Campagna, que vive en la Patagonia y al que visitó varias veces. “Incluso hice un pequeño documental sobre él y los elefantes marinos con los que trabaja, me encantaría volver a esa región, hermosa y enorme”, dijo.

Guy Maddin, amigo y colega de Rossellini y miembro del jurado contó sobre su interés en melodramas mexicanos al inicio de su carrera y posteriormente por la obra de Buñuel, que lo cautivó, particularmente su producción en México. Maddin dijo ser admirador del realizador brasileño Coffin Joe (Zé do Caixao).

LLuvia de películas

El Festival Internacional de cine de Berlín comenzó con la proyección, fuera de concurso, del drama del oeste True Grit, de los hermanos Joel y Ethan Coen. Protagonizada por Jeff Bridges, Josh Brolin, Hailee Steinfeld y Matt Damon, la cinta, que fue nominada diez veces al Oscar, está basada en la novela del mismo nombre de Charles Portis y ha sido un éxito de taquilla en Estados Unidos.

Escenificada en un pueblo de Arkansas en 1870, True Grit cuenta la historia de una niña de 14 años que se propone vengar el asesinato de su padre.

El concurso por el Oso de Oro comenzará el viernes con la proyección de El Premio, de la argentina radicada en México Paula Markovitch. Después de darse a conocer como guionista (Lake Tahoe, de Fernando Eimbecke), Markovitch vuelve a Berlín con su ópera prima, una cinta de tono autobiográfico que aborda la dictadura argentina desde la visión de una niña de siete años. También se proyectará la cinta Margin Call del estadounidense JC Chandor.

Hasta el 19 de febrero serán proyectadas un total de 385 películas, 22 de ellas en la sección competencia, aunque sólo 16 de ellas aspiran a obtener uno de los galardones del festival que serán dados a conocer el sábado 19 de febrero.

Autora: Eva Usi

Editora: Emilia Rojas