Al menos veinte soldados murieron y una decena resultó herida en un puesto fronterizo egipcio este sábado (19.07.2014), cuando un grupo de hombres armados con lanzagranadas los atacó, en uno de los mayores ataques contra las fuerzas de seguridad perpetrados desde la caída del presidente islamista Mohamed Mursi, derrocado en un golpe de Estado en julio de 2013.

La agencia de noticias oficial Mena aseguró que los soldados repelieron el ataque y dieron muerte a tres de los insurgentes, que podrían estar vinculados a las milicias islamistas que han incrementado sus operaciones contra puestos de seguridad desde la caída del gobierno de los Hermanos Musulmanes. Fuentes del Ministerio del Interior dijeron a la agencia EFE que los responsables del atentado eran “contrabandistas”.

El ataque afectó a un puesto de control ubicado en una zona desértica en Al Farafrah, a unos 630 kilómetros al oeste de El Cairo. Allí, un número indeterminado de hombres preparó una emboscada a los soldados, todos ellos miembros de la guardia fronteriza egipcia. Luego habrían tenido lugar largos enfrentamientos, que habrían durado varias horas, según algunas fuentes.

Segundo ataque en pocos días

Una fuente de seguridad explicó a Mena que el ataque de este sábado tiene características novedosas, pues es la primera vez que los milicianos utilizan armas pesadas, como lanzagranadas RPG, contra las fuerzas de seguridad. Fuentes médicas citadas por la agencia AP aseguraron que los servicios de ambulancias habían trasladado 21 cuerpos, algunos de ellos quemados. En los hospitales han sido atendidos al menos cinco heridos.

Es la segunda vez en menos de 90 días que un grupo de militares es víctima de un ataque en esa zona, luego de que cinco soldados y oficiales de las Fuerzas Armadas perdieran la vida en un suceso similar hace algunos días. Las autoridades habían dicho con anterioridad que esperaban un incremento de la actividad insurgente en la región, que se ve influenciada también por las refriegas que afectan a Libia.

DZC (AFP, EFE, dpa, AP)