Al Shabaab, que se adjudicó el atentado del miércoles (19.06.2013), calificó a la ONU de "mercader de la muerte y fuerza satánica del mal". Algunas fuentes hablan incluso de 22 muertos.

Al parecer, uno de los atacantes se voló por los aires a la entrada de las oficinas del Programa de la ONU para el Desarrollo, al detonar un cinturón explosivo. Testigos señalaron que los atacantes estaban vestidos con uniformes militares.

Soldados somalíes y cascos azules de la Unión Africana acudieron al lugar y se enfrentaron violentamente con los asaltantes, hasta que al final retomaron el control del edificio.

"Condeno este ataque despreciable y sin sentido contra civiles inocentes", dijo el primer ministro somalí, Abdi Farah Shirdon.

"La ONU es nuestra amiga y socia, y las agencias de la ONU nos ofrecen ayuda humanitaria y apoyo, así que yo y todos los somalíes estamos consternados por que sean víctima de tal violencia bárbara".

PK (dpa)