La poderosa explosión se produjo en la plaza de Sassine, en el barrio de Ashrafiyeh, de mayoría cristiana, indicó la agencia de noticias estatal ANN. Las fachadas de varios edificios acabaron destruidas por la detonación, mientras que varios vehículos ardieron.

Acusaciones opositoras

Como la explosión se produjo a pocos metros de una sede del movimiento opositor 14 de marzo, muchos libaneses responsabilizan a Siria del atentado. Los partidos del movimiento 14 de marzo rivalizan con la coalición de gobierno, dominada por la organización chiíta Hizbollah, aliada de Siria.

"La explosión en Ashrafiyeh es un mensaje del régimen sirio, que está desmoronándose. Es un mensaje con el objetivo de hundir en el miedo y el horror a los libaneses", afirmó el diputado Nihad al Mashnuk, del opositor Movimiento por el Futuro.

Siria condena el atentado

El gobierno sirio rechazó cualquier responsabilidad. Pocos minutos después del atentado, medios de comunicación sirios emitieron un comunicado en el que el ministro de Información, Omran al-Soabi, condenó el atentado como "acto cobarde de terrorismo".

"Sentí como el suelo temblaba bajo mis pies. Luego cayó cristal sobre nosotros", afirmó un empleado que trabaja en un banco en las inmediaciones del escenario del atentado. Dos de sus colegas resultaron heridos. "La explosión fue inmensa. Abrió un gran agujero en el suelo", dijo un ayudante del servicio de protección civil.

Antecedentes de violencia

Líbano fue azotado entre 2004 y 2008 por una ola de atentados con bomba. Ya por aquel entonces surgió la sospecha de que el régimen del presidente sirio, Bashar al Assad, había participado en la planificación de los ataques.

Siria tuvo que retirar sus últimas tropas del país vecino como consecuencia del atentado con bomba en el que murió el ex primer ministro libanés Rafik Hariri, en febrero de 2005. Desde el comienzo del levantamiento en Siria, Al Assad advierte en contra del comienzo de un "incendio" que podría extenderse pronto por toda la región.

Fuente: dpa

Editora: Emilia Rojas