Un atentado con bomba atribuido al grupo armado ETA ocasionó hoy considerables daños en una comisaría de la policía vasca en la localidad de Zarautz, en el norte de España, así como en las viviendas colindantes, pero sin causar heridos, informaron las autoridades locales.

El atentado de esta madrugada fue el cuarto perpetrado por ETA desde que la organización rompió en junio pasado un alto el fuego que duró 14 meses y que había propiciado un proceso de paz con el gobierno, que finalmente fracasó. El ataque más grave se produjo en la madrugada del 24 de agosto, cuando un coche bomba explotó en un aparcamiento situado junto al cuartel de la Guardia Civil en la localidad vasca de Durango, causando heridas leves a dos agentes y daños materiales muy cuantiosos. Desde el final de la tregua hubo además cinco atentados terroristas fallidos.