Ocho personas murieron este sábado (07.12.2013) en Colombia luego de que un grupo vinculado a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) hiciera detonar explosivos en una estación de la Policía Nacional en el municipio de Inzá, en el suroeste del país. Al parecer, desde un vehículo cargado con cebollas los terroristas lanzaron cilindros contra las instalaciones policiales, asegura el diario El Tiempo. Se informó también de unos cuarenta heridos.

En la acción murieron tres oficiales, un suboficial y un soldado del Ejército, además de un policía y dos civiles que se encontraban cerca. El alto número de víctimas se explica porque la comisaría atacada se encuentra en una plaza muy concurrida de Inzá, una localidad ubicada a 320 kilómetros de Bogotá, donde esta jornada se realizaba el tradicional mercado donde los campesinos llegan al pueblo a vender sus productos. Se trata del peor atentado desde que comenzaron las negociaciones de paz.

El Ejército responsabilizó del ataque al Sexto Frente de las FARC, muy activo en esa zona. El gobernador de Cauca, Temístocles Ortega, repudió el atentado y convocó a que los habitantes de Inzá y en general de toda esa provincia a que salgan a las calles a protestar, con el objetivo de que “esas voces se escuchen en La Habana”, donde el gobierno y la mayor guerrilla de Colombia negocian la paz hace más de un año.

Piden una tregua navideña

El Ejército aseguró que “en un atentado demencial, terroristas de las FARC” atacaron cuando los habitantes “estaban preparando y organizando las actividades del mercado”. El comunicado de la fuerza militar añade que “con este hecho sae demuestra claramente que las FARC de manera sistemática continúian cometiendo actos de terrorismo contra la poblaciíon civil, poniendo en riesgo su vida e integridad física”.

El presidente del Senado, Juan Fernando Cristo, en tanto, aseguró que la actitud asumida por la guerrilla es “francamente inexplicable e inaceptable”, en especial cuando se encuentran en pleno proceso negociador con el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos. “Hay que rechazar esta clase de atentados. Mientras se hacen las negociaciones no se puede escalar (el conflicto) de esta manera y tener esta agresividad contra la población civil”, dijo el parlamentario.

El presidente Santos calificó el hecho como “un ataque terrorista realmente irracional” y anunció que se desplazará a Inzá este mismo sábado para encabezar un consejo extraordinario de seguridad. Por su parte, el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, dijo que el ataque es una muestra de “terrorismo puro”, pues “estos criminales atentaron un día de mercado, sin importar que estuvieran los campesinos y los indígenas”.

DZC (dpa, Europa Press, Reuters, El Tiempo)