El nombre no es bonito pero la dama vuela por lo más alto: Rosetta, la sonda espacial de exploración que será lanzada por la ESA (Agencia Aeroespacial Europea) el próximo 13 de enero de 2003. Rosetta vuela con destino a Wirtana, un cometa de superficie insegura. Duración del vuelo: 8 años. Expertos comprometidos en las investigaciones presentaron hoy dicho proyecto en Munich, estado de Baviera. Los astrónomos esperan obtener, entre otros, información sobre si fueron los cometas los que trajeron la vida a la tierrra, expresó el profesor Ulrich Christiansen del Instituto Max Planck de Aeronomía en la ciudad bajasajona de Katlenbrug-Lindau.

Aterrizaje sin pista

El encuentro de Rosetta con Wirtana tendrá lugar a 800 millones de kilómetros de distancia de la tierra. Pero para poder alcanzar a Wirtana, Rosetta - con sus 3 toneladas de peso - tendrá que tomar buen impulso. Para ello tendrá que dar dos vueltas a la tierra y pasar varias veces por marte. Cuando dicha sonda llegue a Wirtana, enviará una señal que durará 45 minutos en llegar a la tierra, dice Christiansen.

La fase decisiva empezará en el verano del 2012. Para esos días la sonda se prepara para aterrizar. Pera hay una "pequeña" dificultad: Wirtana no cuenta con pistas porque su masa se compone de una gran "bola de nieve sucia". Aún así, Rosetta desplegará su módulo de aterrizaje provisto de arpones y se internará en aquel oscuro mundo de polvo volador.

Rumbo a titán

Pero además de esta aventurada sonda de ingrato nombre, la ESA planea, en los próximos, lanzar sendas naves a mundos extraños. Los aterrizajes en "tierras" lejanas están llenos de riesgos. La sonda Huygens, por ejemplo, se encuentra actualmente en pleno vuelo rumbo a titán, la luna más grande de saturno. Huygens puede resistir temperaturas de hasta 18.000 grados celsius gracias a su caparazón. La gruesa atmósfera de titán puede generar tales temperaturas.

Por otra aerovía se desplaza además, Cassini que "tan pronto como se acerque a Saturno enviará inéditas imágenes de este planeta y titán", dice Jean Pierre Lebreton.

Tormentas de piedra y polvo

Por otra parte, los científicos escogieron cuidadosamente el lugar de aterrizaje de Beagle 2 : ISIDIS Planitia. Este paraje marciano no tiene muchas piedras. "Las temidas tormentas de piedra y polvo que azotan y encubren a marte podrían ser un gran riesgo para Beagle 2", concluye el científico Agustin Chicarro de la ESA.

El proyecto Rosetta - con un costo de 700 millones de euros - es financiado por 14 países, entre ellos, Alemania, Canadá, Estados Unidos y Australia. Los institutos Max Planck de Aeronomía (Maguncia y Landau), de Física Extraterrestre (Garching) son los centros tecnológicos alemanes que contribuyen al proyecto.