El Atlas de los océanos tiene como objetivo informar sobre el estado a nivel global de los mares y con ello contribuir a detener su deterioro. El portal publicado por la ONU con motivo del día mundial del medioambiente, permite al usuario acceder a una gran cantidad de información científica, que es constantemente actualizada.

A través de una amplia cartografía, se puede observar el movimiento de los bloques de hielo polares, las rutas de navegación marítima y la actividad volcánica de los fondos marinos. También se abordan otros fenómenos como la salinidad y las variaciones de la temperatura de los mares.

En el transcurso de unas cuantas décadas, la actividad humana ha puesto en jaque a la biodiversidad y a los ecosistemas marinos. La industria pesquera, la destrucción de las costas y la contaminación industrial y agrícola, así como la generada por los desechos domésticos, representan un peligro cada vez mayor para la existencia de peces, el ecosistema marino e incluso para el clima mundial.

Claves para la existencia del planeta

Los océanos desempeñan un papel esencial en el mantenimiento de la vida en la tierra. Actualmente 17 bancos pesqueros del mundo se encuentran sobreexplotados, lo que significa una grave amenaza para la biodiversidad marina y la actividad pesquera, fuente básica en la alimentación de la mayor parte de la población mundial.

En el diseño y elaboración del Atlas, que tuvo una duración de dos años, participaron numerosas instituciones y científicos de todo el mundo, bajo la dirección del departamento de pesca de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), con sede en Roma. Entre las organizaciones que apoyan el proyecto se encuentran la National Geographic Society, el Departamento de Navegación y Oceanografía ruso, así como la Administración norteamericana de los Oceános y la Atmósfera.

El proyecto multidisciplinario fue concebido como fuente enciclopédica interactiva, ya que permite el intercambio de información científica a nivel mundial. Sin embargo, los autores insisten en que el mapa multimedial está dirigido al público en general, desde escolares y educadores, hasta responsables del ámbito político y administradores de recursos.