En 2020, el joven político negro Brandon Scott es elegido alcalde de Baltimore. La tasa de criminalidad de la ciudad es alta. Es la época de protestas masivas en EE. UU. tras la muerte del afroamericano George Floyd a causa de violencia policial. Brandon Scott, un reformista idealista, creció en Baltimore, en una época marcada por la violencia y la descomposición social. Perdió amigos por la violencia armada y conoce la realidad de las calles por experiencia propia. Como alcalde, junto con su equipo, persigue el objetivo de reducir la criminalidad, que se encuentra muy por encima de la media. Su lema: en una ciudad desbordada por la violencia, la paz es lo único por lo que vale la pena luchar. En lugar de apostar por el control y las detenciones, como hicieron gobiernos locales anteriores, Scott adopta un enfoque preventivo. Quiere crear alternativas, abrir perspectivas y dar esperanza. Pero apenas asume el cargo, se ve sobrepasado por una nueva ola de violencia. Sus reformas aún no se han implementado cuando sus principios ya están bajo presión. Los medios y sus adversarios políticos atacan su política "woke”, y el gobernador de Maryland se niega durante meses a hablar con él, a pesar de ser quien decide sobre los fondos estatales. El reportaje acompaña a Brandon Scott y a su equipo durante su primer año en la alcaldía. Muestra la lucha de un hombre que se mantiene fiel a sus convicciones, frente a resistencias, retrocesos y aislamiento político. ¿Podrá su enfoque integral sanar a la sociedad? ¿Y podría convertirse en modelo para otras ciudades de EE. UU.?