Tres semanas antes de asumir el cargo como máximo responsable de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon continuó en Berlín la gira de visitas oficiales previa a su mandato entrevistándose con la canciller alemana Angela Merkel.

Además de agradecer el apoyo alemán a su candidatura como secretario general de la ONU, Moon alabó la labor del Gobierno alemán en acciones de ayuda humanitaria y misiones de paz, además de su compromiso como defensor de los derechos humanos.

En el siglo XXI el mundo está ante muchos desafíos y las experiencias comunes y los conocimientos de la comunidad internacional serán decisivos para buscar soluciones."Independientemente de su fortaleza o de los medios que posea, ningún país del mundo puede enfrentarse a ellos en solitario", comentó Ban.

Objetivo: reforma de la ONU

Durante la reunión, Angela Merkel comentó que debe hacerse todo lo posible para lograr que la ONU sea aceptada como la voz de la comunidad internacional. Y a su vez, la canciller se comprometió a colaborar estrechamente con la ONU en un momento en que Alemania tendrá un papel protagonista en la política mundial.

La entrevista no podía haberse celebrado en mejor momento para ambas partes. Al tiempo del comienzo del nuevo mandato en la ONU, Alemania asumirá la doble presidencia del G8 y la Unión Europea, circunstancia que Moon espera aprovechar para una cooperación más intensa y constructiva. Merkel añadió además que su Gobierno apoyará activamente la debatida reforma dentro del seno de la ONU.

Durante su visita a la capital alemana, Ban se entrevistó también con el ministro de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier. En las conversiones se trataron temas como Oriente Medio y el conflicto atómico con Irán. Durante la cita, Steinmeier mostró su optimismo con el nuevo mandatario de la ONU hablando de un "Renacimiento de las Naciones Unidas". Al finalizar, Ban aceptó la invitación del ministro alemán para visitar próximamente Bonn como sede de las Naciones Unidas en Alemania.