Kamala Devi Harris nació el 20 de octubre de 1964 en Oakland, California. Su padre, Donald J. Harris, economista de renombre, procede de Jamaica. Su madre, Shyamala Gopalan, de la India, y trabaja en la investigación del cáncer de mama. En esta foto, sin fecha, se muestra a Kamala Harris en el laboratorio de su madre, en la Universidad de Berkeley, California.

Sus padres se separaron, y Kamala (izquierda) y su hermana menor Maya (centro) crecieron con su madre, fallecida en 2009. "Nos educó para ser mujeres negras fuertes y orgullosas. Y nos enseñó a conocer nuestra herencia india y a estar orgullosas de ella", relata Harris en un discurso pronunciado en 2020. La familia vivía por temporadas en Montreal, Canadá.

Los padres de Kamala Harris participaron activamente en el movimiento por los derechos civiles. Ella misma reconoce en su autobiografía que eso tuvo una gran influencia en su propia carrera. A los 18 años, Harris (derecha) participó en una manifestación contra el apartheid. En ese momento, estaba terminando su primer año de estudios en la Universidad Howard, de Washington D.C.

Con poco más de veinte años, Harris se licenció en la Universidad privada Howard, de Washington, en 1986, y tres años más tarde lo hizo en Derecho en la Universidad estatal de California, en San Francisco. En 1990 fue admitida en el Colegio de Abogados de California y ejerció como abogada.

En 2004, Harris se convierte en fiscal del distrito de San Francisco. Es la primera vez que una mujer ocupa este cargo. La madre de Kamala (centro) sostiene un ejemplar de la Carta de Derechos de los Estados Unidos, las diez primeras enmiendas de la Constitución que garantizan a los habitantes de EE. UU. derechos básicos inalienables en el marco de una sociedad libre y democrática.

En 2011, Kamala Harris se convierte en fiscal general del estado estadounidense de California. Es la primera vez que se nombra para este cargo a una mujer, y también a una mujer negra. Su mandato también genera conflictos. Por ejemplo, como jefa de Policía, rechaza la pena de muerte, incluso para los casos de asesinatos a policías.

En 2016, Harris es elegida senadora por el Partido Demócrata de California y renuncia a su cargo de fiscal general. En esta imagen de enero de 2017, el entonces vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, le toma juramento a Harris. Junto a ella, su marido, el abogado Douglas Emhoff, con una Biblia en la mano.

Poco después, en 2020, el entonces vicepresidente de EE. UU. y la senadora Harris vuelven a encontrarse como candidatos a la nominación presidencial del Partido Demócrata. La imagen muestra un duelo televisivo en la cadena NBC con el otro candidato, Bernie Sanders. Harris y Biden se enfrentaron duramente en aquella campaña electoral interna del partido.

Harris renuncia finalmente a ser la candidata presidencial demócrata debido a los bajos índices en las encuestas, y apoya a Joe Biden. Este es nominado por los demócratas y nombra a Kamala Harris su adjunta en caso de victoria electoral. Los demócratas ganan las elecciones presidenciales estadounidenses de 2020 con Biden y Harris.

El 20 de enero de 2021, Kamala Harris jura el cargo de vicepresidenta de Estados Unidos, la primera mujer en ocupar este cargo en ese país. La toma de posesión tanto de Harris como del presidente Joe Biden se produce bajo extremas medidas de seguridad debido a la irrupción, semanas antes, de partidarios del presidente electo Donald Trump en el Capitolio de Estados Unidos, en Washington D.C.

Una de las primeras tareas de la vicepresidenta Harris es el control de la inmigración desde el sur hacia Estados Unidos. Su empeño la lleva a varios países centroamericanos. En la imagen, Harris se reune con el entonces presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei. Pero los cruces irregulares en la frontera alcanzan nuevos récords. Los republicanos critican duramente a Harris por ello.

Harris, en cambio, se distingue mejor en el ámbito de la política de seguridad. En un discurso pronunciado en la Conferencia de Seguridad de Múnich en febrero de 2024, la vicepresidenta declaró explícitamente su apoyo a la OTAN y a la cooperación internacional. Con ello, Harris se diferenció claramente del candidato presidencial republicano Donald Trump.

Al igual que Joe Biden, Harris también apoya la ayuda estadounidense a Ucrania para defenderse de la invasión rusa. La vicepresidenta ha calificado en repetidas ocasiones las acciones de Rusia en Ucrania de "terribles atrocidades", "crueles" e "inhumanas", y describió la muerte bajo custodia del líder opositor Alexei Navalny como "otra muestra de la brutalidad" del presidente ruso Vladimir Putin.

Harris se desmarca claramente de los republicanos en la cuestión del aborto. Tras la anulación de la sentencia sobre el derecho al aborto por parte del Tribunal Supremo de Estados Unidos, Harris lanzó una campaña a favor de la autodeterminación reproductiva. Se trata de una cuestión especialmente importante para los votantes jóvenes.

De ser elegida como candidata demócrata, Kamala Harris solo contaría con tres meses para hacer campaña. Pese a todo, solo unas horas después de la propuesta de Biden de nominarla, llegaron más de 50 millones de dólares en donaciones. Harris también podría motivar a personas negras a votar, aunque con la discriminación racial y de género del país, podría encontrar desventajas.