El presidente estadounidense, Barack Obama, se reunió este miércoles (04.01.2017) con legisladores demócratas en un último esfuerzo por salvar su programa de salud conocido como "Obamacare", mientras el futuro vicepresidente, Mike Pence, declaró hoy como la mayor prioridad para sus primeros días en el cargo la derogación de la reforma sanitaria del Gobierno saliente.

Obama se reunió con los legisladores demócratas en el Capitolio para trazar un plan para proteger la reforma sanitaria tras las reiteradas afirmaciones del presidente electo, Donald Trump, y de su vicepresidente, de que la derogarán.

Según los representantes tras la reunión, el todavía presidente alentó a los demócratas a luchar por la ley. Durante el encuentro de más de 90 minutos, Obama agradeció a los congresistas por los progresos que habían alcanzado juntos en sus ocho años de gobierno a pesar de las obstrucciones de los republicanos, dijo el portavoz Josh Earnest.

"La salud no es un privilegio”

Obama no ofreció "consejos técnicos" sobre cómo detener el esfuerzo republicano, pero dijo que cree que "son principios por los que vale la pena luchar". "La salud no es un privilegio. El acceso a la igualdad, a un seguro médico asequible no es un privilegio. Es un derecho", señaló.

Pence, por su parte, se reunió también con miembros del Congreso pero destacó su rechazo al "Obamacare". "Mantendremos nuestra promesa con el pueblo estadounidense. Revocaremos la 'Obamacare'", dijo Pence ante la prensa. 

Tras la implantación de "Obamacare" hay diez millones más de personas con seguro médico. El sistema obliga a estar asegurado pero también ha sido muy criticado, en parte por carencias estructurales.

CT (dpa, EFE)