El último rescate se produjo en la noche del domingo (24.10.2021) cuando los activistas de Alarm Phone, que reciben las llamadas de los migrantes en peligro, advirtieron de que un bote neumático con 71 personas se encontraba en situación de grave peligro.

"Gracias al aviso de Alarm Phone hemos conseguido llegar hasta un bote que estaba embarcando agua, ya que las condiciones del mar eran muy duras con olas de tres metros y viento de hasta tres nudos. A pesar de ello, hemos podido salvar a las 71 personas a bordo", informó MSF en sus redes sociales.

Desde que volvió a la zona del Mediterráneo central, el Geo Barents ha realizado varias operaciones de socorro, la primera fue el pasado 22 de octubre, cuando salvó a 36 migrantes, entre ellos 15 menores.

También hoy se espera la llegada a Trapani, en la isla italiana de Sicilia, del barco español Aita Mari, de la organización Salvamento Marítimo Humanitario, donde podrán desembarcar los 105 migrantes que rescató el pasado martes en el Mediterráneo Central.

Según informó hoy esta ONG en un comunicado, tras seis días de espera, el buque recibió este domingo la notificación por parte del centro de coordinación de Roma para que se dirija al puerto de Trapani y proceda al desembarco de estas personas, rescatadas en la zona SAR (búsqueda y rescate, en inglés) de Malta.

Malta no sólo rechazó hacerse cargo del desembarco de los migrantes sino que también intimó al Aita Mari a que se alejase de sus aguas territoriales, donde se habían acercado para refugiarse del mal tiempo.

Este fin de semana también llegó a Pozzallo, en Sicilia, el barco de la ONG Sea Watch con 406 migrantes a bordo.

Además, un total de 370 migrantes fueron interceptados durante el fin de semana en aguas del Mediterráneo frente a la costa de Libia y retornados a ese país pese a ser considerado un lugar "no seguro", informó la Agencia de Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR). (EFE).