Tres barcos humanitarios con 399 migrantes rescatados en el Mediterráneo central en los últimos días esperan una respuesta a su petición a los países del área para que les proporcionen un puerto urgente para desembarcar.

La última operación se produjo la noche del martes 21 de diciembre, cuando el barco de la ONG Médicos sin Fronteras, el Geo Barent, rescató a 69 migrantes a bordo de una lancha neumática. "Están exhaustos y muchos tenían lesiones en las piernas debido a la violencia que han sufrido, que están curando nuestro equipo médico", explicó la organización en las redes sociales.

"Han pasado seis días desde que 114 hombres, mujeres y niños fueron rescatados por el Ocean Viking y esperan un refugio seguro. Después de enfrentar una terrible violencia en Libia y un peligroso viaje por mar, deben desembarcar sin más demora", escribió en sus redes la ONG Sos Mediterranée.

También espera desde hace cinco días el Sea Eye 4 de la homónima ONG alemana con 216 migrantes a bordo. "Hubo otra evacuación médica porque la salud de un hombre se deterioró dramáticamente", comunicó la organización sobre una nueva evacuación tras las de los pasados días en las que la Guardia Costera italiana se hizo cargo de dos hombres que habían empeorado rápidamente.

El Sea Eye 4 espera la autorización de Italia para desembarcar después de que Malta rechazase ocuparse de los migrantes. Esta embarcación llevó a cabo cuatro operaciones de rescate en la zona SAR (búsqueda y rescate en inglés) de Malta. El barco informó al centro de coordinación de Malta de cada paso, pero el centro negó cualquier responsabilidad. "No respondió a nuestros correos electrónicos, ni tomó el control de las operaciones de rescate”, denunciaron. 

A pesar de que en esta época del año disminuye la llegada de migrantes procedentes del norte de África, la inestabilidad en Libia no ha detenido este fenómeno y desde el 1 de enero hasta el 20 de diciembre han llegado a Italia 63.713 migrantes, frente a 33.394 en el mismo período de 2020. (efe)