El líder solitario de la Bundesliga se llama Bayer Leverkusen. El equipo sensación de la temporada logró entender las órdenes de Xabi Alonso al grado de jugar como lo hacía el mismísimo campeón del mundo con España en 2010, lo cual no es otra cosa que un juego de pases altamente efectivo con elementos en cancha aptos para ejecutarlo. En primera instancia, el suizo Granit Xhaka y el argentino Exequiel Palacios son los reyes del pase, los virtuosos del control defensivo, pero también quienes comandan la génesis del ataque. El modelo Xabi lo confirma: seis de los diez mejores pasadores de la liga juegan en el Leverkusen.

Así, el transcurrir del torneo se ha encargado de hacer justicia al conjunto colectivo el Bayer, pero con el acento puesto en las individualidades que hacen gala de esta idea de juego. A partir de ello, cabe mencionar el despunte futbolístico del español Alejandro Grimaldo bajo las órdenes de su compatriota. Incluso, su momento en el Leverkusen le ha valido al valenciano el honor de representar a su país por primera vez como lo celebrara a través de su cuenta de Instagram el pasado mes de noviembre de cara a compromisos de eliminatorias rumbo a la Eurocopa 2024.

Grimaldo, el mago español

Por la forma en que Xabi le cambió la cara al Leverkusen, podría decirse que le funcionaron los refuerzos de manera espectacular. Si bien Víctor Boniface, Granit Xhaka y Jonas Hofmann apuntalaban las incorporaciones a inicios de torneo, la verdad es que en Leverkusen la fórmula siguió certificando talentos. A sus 28 años, Alejandro Grimaldo inicia el año alineado junto a los iluminados de un Bayer con aires de campeón y la pieza más reciente en este esquema de individualidades y grandes pasadores. Es decir, lo del club del laboratorio es un éxito de muchas caras.

La banda izquierda de los "aspirinos” tiene a un zurdo privilegiado. Grimaldo es un ejecutor de tiros libres, saques de esquina, y proveedor de asistencias. Lo mismo es capaz de colgar la pelota parada al ángulo, que aterrizar córners en zona de peligro. Su última pegada encontró complicidad en el ecuatoriano Piero Hincapié, quien, en perfecta ubicación para rematar el tiro de esquina de Grimaldo, puso el 3:2 definitivo ante el Leipzig en el minuto 94. En otras palabras, cada tiro libre del español tiene un peso específico en la carrera por el título. El Leverkusen sumó los tres puntos en Leipzig.

El hoy fichaje bomba del Leverkusen llegado del Benfica de Portugal es un arma a balón parado: en la jornada cuatro ante el Bayern Múnich- único perseguidor del Bayer en la carrera por el título - Grimaldo cobró un tiro libre perfecto desde el borde del área rival. Una anotación al margen del mérito al trabajo y la constancia según confirmaban las declaraciones del propio Xabi Alonso cuando aseguró que era casi un gol cantado por las tantas veces que vio a Grimaldo hacer la misma ejecución en los entrenamientos. El Leverkusen repartió puntos en Múnich.

Pero también las asistencias desde la banda izquierda llevan el sello de letalidad. La jugada está trabajada sin cabida a coincidencias: cuando atacan dos compañeros, el centro tiene que ir al espacio peligroso entre la portería y los atacantes que se suman al frente. Así vacunó al Colonia desde sector izquierdo, también al Augsburg. En total, el español ya lleva 8 asistencias y 7 goles cuando está por jugarse la jornada 19 de Bundesliga 2023/2024.

¿Miedo o motivación en Leverkusen?

El equipo de la farmacéutica encadena 26 partidos invictos y cerró el 2023 como campeón de otoño. Sus hinchas, no obstante, oscilan entre el sueño y el trauma. Y aunque se permiten contagiarse de ilusión por el buen momento del equipo, los recuerdos del 2000 y el 2002, cuando comandaban la liga, amargan las aspiraciones. El trágico desenlace que los relegó al subcampeonato esos años, por detrás del Bayern Múnich y el Borussia Dortmund, respectivamente, dieron lugar al burlón apodo de "Vicekusen” entre algunos aficionados. De hecho, son cinco subcampeonatos los que el Bayer ha logrado en 45 años ininterrumpidos en Bundesliga.

Resta por jugarse poco menos de la mitad del torneo, la pregunta es si predominará el miedo a la decepción o la motivación por mantener una temporada hasta ahora casi perfecta. El equipo no podrá contar con el nigeriano Victor Boniface hasta abril debido a una lesión, por suerte, Patrick Schick cerró el año con un triplete en señal de recuperación. Ausentes también están Odilon Kossounno, Edmond Tapsoba y Amine Adli, concentrados con sus selecciones en plena Copa de África. De manera que Alonso está ante la prueba de fuego en su misión por demostrar la perspicacia de su dominador sistema de extraordinarios jugadores individuales que hacen un colectivo superior, hasta ahora ampliamente favorito en la ansiada conquista de la Bundesliga.