Tras vencer a Bochum por 3-1 y sacar una ventaja prácticamente inalcanzable sobre Schalke, su rival más enconado en la lucha por el título, el Bayern Múnich se convierte en virtual campeón de la Bundesliga alemana de fútbol.

Schalke sirvió el campeonato en bandeja a los bávaros al perder en casa por 2-0 ante Werder Bremen.

Cuando resta por jugarse una sola fecha, Múnich tiene 67 puntos, tres más que Schalke, y además un gran colchón de goles a favor. En caso de empate a puntos, la Bundesliga se define por la diferencia de tantos y el equipo dirigido por el holandés Louis van Gaal tiene 17 goles a más a su favor que Schalke.

De esta manera, Bayern Múnich tiene prácticamente asegurado el primero de los tres títulos que puede lograr esta temporada, ya que está además en las finales de la Copa alemana y de la Champions League europea.

La fecha 33 del torneo sentenció por otra parte al descenso a segunda división al Hertha Berlín, al que no le sirvió un empate de visitante ante Bayer Leverkusen. Con esto, la capital alemana dejará de tener fútbol de primera la próxima temporada. Hannover, Bochum y Núremberg son los otros equipos que corren peligro de perder la categoría y que sufrirán hasta el último minuto de la última fecha.

Fiesta en la Allianz Arena

El hombre que hizo festejar a los 69.000 espectadores en la Allianz Arena de Múnich fue Thomas Müller, de 20 años, uno de los numerosos jugadores de la cantera del Múnich a los que Van Gaal les entregó la titularidad a lo largo de la temporada, relegando a estrellas como Miroslav Klose y Mario Gómez al banco de suplentes. "Esto es un sueño, mi primer año en la Liga, mis primeros goles, mi primer campeonato, mi primer triplete, todo esto es increíble", fue el comentario de Müller después del encuentro.

Van Gaal, el primer entrenador holandés en salir campeón en Alemania, fue festejado hoy como el artífice del éxito bávaro por descubrir a jugadores como el central Holger Badstuber o el marcador izquierdo germano-italiano Diego Contento.

Schalke despierta

Los sueños de Schalke de alzar la copa de campeón de Liga por primera vez en 52 años fueron sepultados por la derrota por 2-0 ante Werder Bremen con goles de Mesut Özil, ex jugador del equipo de Gelsenkirchen, y del portugués Hugo Almeida.

Felix Magath, entrenador de Schalke, el técnico que ganó más campeonatos que nadie en los últimos años -dos con Bayern Múnich y uno con Wolfsburgo-, felicitó al casi campeón: "Sólo lamento no haberle podido regalar un título a la hinchada de Schalke, en este estadio viví esta temporada cosas tan intensas como en ningún estadio del mundo".

Con el triunfo de hoy, Bremen dio un gran paso para asegurarse el tercer puesto, lo que le permitiría jugar la clasificación para la próxima Champions League. Bayer Leverkusen y Borussia Dortmund, los únicos rivales que pueden incomodar a Bremen, no salieron hoy de sendos empates a un gol y quedaron rezagados. dpa

Editor: Claudia Herrera Pahl