La pesadilla de aquel maravilloso “Sueño de Verano”, como se conoció al mundial de fútbol Alemania 2006, no cesa y cada vez hay más posibles implicados en la trama. Además del comité organizador y otras empresas cercanas, a quienes se acusa de corrupción para lograr la concesión del mundial, ahora la atención mediática se centra en otras figuras emblemáticas del futbol alemán como el káiser Frank Beckenbauer y el Bayern Múnich.

Partidos amistosos y “sospechosos”

Según una nota publicada en el diario Frankfurter Allgemeine, dichas acusaciones se refieren a partidos amistosos “sospechosos”, que el Bayern de Múnich habría jugado en países como Malta, Tailandia, Túnez y Trinidad y Tobago, en condiciones muy por debajo del mercado.

Para las investigaciones de la Federación Alemana (DFB) dichos encuentros se celebraron antes de la concesión del mundial a Alemania, en países de donde procedían algunos de los miembros de los órganos decisores de la FIFA. En la nota se menciona la investigación de las autoridades maltesas sobre un supuesto contrato que Beckenbauer, entonces presidente del Bayern y jefe de la candidatura alemana para el mundial, habría firmado con el presidente de la Federación de Malta, Joe Mifsud, miembro de la presidencia de la FIFA. Además del partido jugado por el Bayern Múnich contra Malta, también jugó otros contra Tailandia y Túnez.

Ante las acusaciones, el káiser evitó pronunciarse en público, si bien se puso a disposición de los responsables de la investigación según señaló la empresa que lo representa. Por parte de su club, Beckenbauer recibió apoyo del Bayern Múnich, del que es presidente de honor. "Cuando un amigo atraviesa una etapa difícil hay que ayudarlo", dijo el presidente del Bayern, Karl-Heinz Rummenigge." Entiendo que la DFB tenga interés en esclarecer el asunto. Pero pido más consideración hacia Franz Beckenbauer porque la DFB tiene mucho que agradecerle", continuó el directivo.

Documentos que aparecen y desaparecen

Además de los supuestos acuerdos de Malta, según información publicada por la revista Der Spiegel, recientemente se encontró un documento supuestamente firmado por Beckenbauer con el presidente de la Federación de Trinidad y Tobago, Jack Werner, actualmente alejado de sus funciones en la FIFA por corrupción. En este pre acuerdo se habrían prometido ciertas prestaciones a la Federación de Norteamérica Centroamérica y el Caribe (CONCACAF).

Dicho documento podría haber sido también una de las razones que provocaron la dimisión del presidente de la DFB, Wolfang Niersbach. Según la información publicada, el directivo conocía la existencia del documento antes incluso de comparecer en la conferencia de prensa ofrecida el 22 de octubre, donde resaltó la legitimidad en la concesión del mundial desmintiendo la existencia de cajas negras y compra de votos. Aunque Niersbach argumentó entonces su dimisión por responsabilidad "política", ahora será difícil aclarar por qué negó las acusaciones si ya conocía la existencia del contrato mencionado.