Se acabaron los juegos para el Bayern Múnich. El gigante alemán necesita mañana un triunfo convincente ante el Basilea en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones europea para espantar los fantasmas de la crisis.

Los jefes del Bayern temen por los objetivos de la temporada, cuyo punto culminante es nada menos que la final de la Champions en el Allianz Arena de Múnich.

Después del 0-0 en la Bundesliga ante el último de la tabla, el Freiburg, el presidente del consejo de administración, Karl-Heinz Rummenigge, reunió a los miembros del equipo en una charla privada para dejarles claro la seriedad de la situación.

"Esta tuvo que ser ya la última advertencia", dijo el delantero Mario Gómez. "Debemos conseguir rápidamente salir en cada partido al máximo de concentración y motivación".

Fuera de casa, sin embargo, el Bayern sólo ha ganado cuatro de los últimos 12 partidos. Por eso, la victoria en Suiza debe servir a los bávaros no sólo como tranquilidad para la vuelta del 13 de marzo, sino como señal.

Partido clave

La charla de Rummenigge fue bien recibida por el entrenador del equipo, Jupp Heynckes. "Pienso que es muy importante que todas las fuerzas cooperen", señaló el técnico en la rueda de prensa previa al partido en el hotel del equipo en Basilea.

El equipo debe mostrar otra actitud, pero el entrenador tiene la exigencia de construir un colectivo sólido a partir de las magníficas individualidades.

La ausencia de Bastian Schweinsteiger en el centro del campo no puede ser la justificación de la falta de ritmo, advirtió la dirección. "Para lograr nuestros objetivos, debemos jugar con compromiso y concentración", exigió Rummenigge, que quiere ver de vuelta el Bayern que ganó en la fase de grupos a Manchester City y Napoli.

Una derrota ante los suizos aún complicaría más la situación de los bávaros, que son terceros en su liga doméstica y juegan el domingo contra un Schalke que los amenaza desde la cuarta plaza.

El Basilea, entrenado por un Heiko Vogel que fue técnico en las categorías juveniles del Bayern, pretende sacar partido a las turbulencias en el gigante alemán. Ya lo hizo en la fase de grupos ante el poderoso Manchester United, que ni siquiera pudo meterse en octavos de final.

Autor: Klaus Bergmann (dpa)

Editor: Enrique López