El equipo amarillo y negro que dirige el joven entrenador Jürgen Klopp es considerado como el “virtual campeón” del fútbol alemán 2010/2011 gracias a la enorme ventaja que le ha sacado a sus competidores (10 puntos sobre Leverkusen, que es segundo), pero el Bayern –que es tercero a 13 puntos del líder- no se ha dejado desmotivar por la (aparentemente) enorme diferencia y considera que con un triunfo en casa, reduciendo la ventaja a sólo 10 unidades en la clasificación, y con 10 jornadas por jugar antes del cierre de la temporada, sus posibilidades de defender el título obtenido el año pasado aún siguen vivas.

Con los nervios de punta

Es claro que en ambos bandos reina el nerviosismo como producto de todo lo que está en juego; para el Dortmund un positivo resultado significaría la confirmación de un título que prácticamente tiene en el bolsillo, para el Bayern un aliciente más para apretar el acelerador en la Bundesliga en busca del campeonato, lo cual sería muy bien recibido por la afición y las directivas pues ello repercutiría favorablemente en las otras competiciones en las que aún participa el club de Múnich, la Champions League y la Copa Alemana.

El Dortmund, que no es exigido en otros torneos nacionales o internacionales pues fue eliminado de ellos ya hace algún tiempo, pudo concentrarse en el trabajo preparatorio del duelo en Múnich a lo largo de la semana, algo que para nada le gustó al entrenador del Bayern Louis van Gaal, quien al terminar el miércoles el extenuante partido de octavos de Champions League en el que derrotó al Inter Milán en Italia se quejó de esa desigualdad de condiciones por culpa del calendario: “la Federación Alemana de Fútbol debería ser más considerada con nosotros, el partido contra el Dortmund debería jugarse el domingo, así tendríamos un día más para recuperarnos, lo que sería justo”.

Pero así como van Gaal teme que el rendimiento de su equipo se vea afectado por el cansancio, en Dortmund hay un estado de alarma pues se sospecha que el Bayern va a aprovechar la oportunidad para tentar a sus estrellas e intentar arrebatárselas ofreciéndoles jugosos contratos. Una de ellas, por lo menos, está seriamente en la mira del club de Múnich por dos razones, primero porque se formó allí, segundo porque es un jugador que requiere urgentemente: Mats Hummels, defensor central.

Mientras ese posible fichaje se debate, los directivos y jugadores del Dortmund y del Bayern no cesan de atacarse mutuamente en una guerra sicológica. En Múnich sostienen que “se ganará el partido por una diferencia mínima de 2 goles” (el presidente Uli Hoeness), e “incluso más” (Karl-Heinz Rummenigge); en Dortmund el juvenil jugador Kevin Grosskreutz replica altivamente “vamos a mostrarle al Bayern por qué somos los primeros de la clasificación, con palabras no van a ser campeones”.

Favorables estadísticas

El club de Múnich, sin embargo, enfrenta tranquilo el compromiso pues la historia le da confianza: el Dortmund no le gana al Bayern en su estadio desde hace casi 20 años, la última victoria la obtuvo en 1991 y desde entonces –en 18 encuentros- ha tenido que regresar a casa con 12 derrotas en el equipaje y tan sólo 6 “positivos” partidos igualados. En total estos dos tradicionales clubes se han enfrentado en su historia en 91 ocasiones con balance favorable para los muniqueses de 43 triunfos, 27 empates y sólo 21 perdidas.

De todas formas la situación actual es distinta, el Dortmund es el mejor equipo visitante de la presente temporada en Alemania acumulando 31 puntos en estadios ajenos, donde ha ganado en 10 ocasiones y está a sólo una victoria de igualar un récord en la Bundesliga que comparten Bremen y Hamburgo. Aún así el Bayern puede esgrimir a su favor el ser el mejor equipo local del campeonato con 26 puntos obtenidos, a lo cual se suma el haber ganado todos sus 7 partidos más recientes en la Allianz Arena.

Por lo menos en algo están estos dos rivales muy equilibrados: ambos poseen las delanteras más peligrosas y efectivas de la Bundesliga (49 goles) y las defensas que menos anotaciones han permitido contra sus vallas (Dortmund apenas 13 goles, Bayern 27). La afición puede contar con un partido lleno de emociones que marcará la ruta de la intensidad de lo que resta del campeonato.

Autor: Daniel Martínez

Editor: José Ospina-Valencia