El "padre" del fútbol alemán, Franz Beckenbauer, propuso que el Mundial de fútbol de 2022, adjudicado al emirato árabe de Qatar, sea disputado en invierno para evitar así las temperaturas de hasta 50 grados que reinan en la época estival.

"Tendría más sentido buscar otra solución. En enero y febrero, las temperaturas oscilan en torno a niveles agradables de unos 25 grados", dijo el "Kaiser" en declaraciones que publica hoy el diario Bild.

Beckenbauer, miembro del comité ejecutivo de la FIFA que se decantó de forma sorpresiva por el emirato árabe, opinó que un Mundial a principios de año no interferiría demasiado en los calendarios de los campeonatos de fútbol europeos.

"Están planeados cambios en los cronogramas de las grandes ligas europeas en 2012 y eso significaría que el impacto sería menor", argumentó, y añadiendo que la solución invernal "sería una alternativa viable a los enormes gastos en que se deberá incurrir para instalar aire acondicionado en los estadios y en las zonas destinadas a la afición". (dpa)